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Filipenses 1 - Comentario Crítico y Explicativo Conciso vs Mundo Hispano vs El ilustrador bíblico

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Filipenses 1

CAPITULO 1

INSCRIPCION. HACIMIENTO DE GRACIAS Y ORACIONES POR EL FLORECIENTE ESTADO ESPIRITUAL DE LOS FILIPENSES. SU PROPIA CONDICION EN ROMA, Y EL RESULTADO DE SUS PRISIONES EN LA EXTENSION DEL EVANGELIO. EXHORTACION A LA FIRMEZA CRISTIANA.

1. Timoteo—mencionado como bien conocido de los filipenses (Hechos 16:3, Hechos 16:10), y ahora presente con Pablo. No que Timoteo tuviese parte alguna en la redacción de la carta, porque Pablo luego usa el pronombre personal, “yo”, en vez del “nosotros” (v. 3). La mención de su nombre significa solamente que Timoteo se unió a los recuerdos afectuosos para ellos. siervos de Jesucristo—Pablo no se llama “apóstol”, como en la inscripción de otras Epístolas porque a los filipenses no hacía falta recordarles su autoridad apostólica. Escribe más bien, en un tono de íntimidad cariñosa. todos—así en v. 4, 7, 8, 25; Hechos 2:17, Hechos 2:26. Sugiere el afecto comprensivo que deseaba no olvidarse de ninguno de ellos. obispos—Sinónimo con “presbíteros” en las iglesias apostólicas, como aparece del hecho de que las mismas personas son llamadas “ancianos de la iglesia” de Efeso (Hechos 20:17), y “sobreveedores” (Hechos 20:28), griego, “obispos.” Y cf. Tito 1:5 con el v. 7. Esta es la primera carta de Pablo donde se mencionan obispos y diáconos, y la única en donde se los saluda por separado. Esto concuerda con el probable orden de los acontecimientos, deducido así de las cartas como de la historia. Mientras los apóstoles visitaban constantemente a las iglesias en persona o por medio de mensajeros, había menos necesidad de pastores regulares. Conformemente, las tres Epístolas pastorales, de fecha posterior a ésta, dan instrucción en cuanto al debido nombramiento de obispos y diáconos. Concuerda con esta nueva necesidad de la iglesia, cuando los otros apóstoles estaban muertos o apartados, y Pablo estaba por mucho tiempo en la cárcel, el que los obispos y diáconos fuesen prominentes por vez primera en la salutación introductoria. El Espíritu así intimaba que las iglesias habían de depender de sus propios pastores ahora que los dones milagrosos estaban dejando lugar a las providencias ordinarias de Dios, y había de ser retirada la presencia de los apóstoles inspirados, los dispensadores de estos dones, (1) (Paley. Horae Paulinae). “Presbítero” sugiere rango; “obispo”, los deberes de oficio [Neander]. Naturalmente, cuando los apóstoles que tenían la dirección principal, ya no estaban más, uno entre los presbíteros presidía y recibía el nombre de “obispo”, en el sentido más restringido y moderno; así como en la sinagoga judía uno de los ancianos presidía como “príncipe de la sinagoga”. Nótese que el apóstol se dirige a la iglesia, (esto es, a la congregación) más directament que a sus ministros presidentes (Colosenses 4:17; 1 Tesalonicenses 5:12; Hebreos 13:24; Apocalipsis 1:4, Apocalipsis 1:11). Los obispos cuidaban más bien de los asuntos internos, los diáconos de los externos, de la iglesia. El vocablo en plural demuestra que había más de un obispo o presbítero, y más de un diácono en la iglesia de Filipos.

2. Gracia … y paz—La misma forma de esta salutación sugiere la unón de judío, griego y romano. La salutación griega era “gozo” (chairein, así en Hechos 15:23; Santiago 1:1) afín del griego “gracia” (Charis). La romana era “salud”, término intermedio entre gracia y paz. La hebrea era “ paz”, que incluía la prosperidad temporal así como la espiritual. de … del—una sola preposición ocurre en el griego, lo que pone en vínculo más estrecho “el Dios Padre” y “el Señor Jesucristo”.

4. haciendo oracióntradúzcase: “haciendo mi oración,” o “pedido” por todos vosotros—La frecuente repetición de “todos” con “vosotros” indica que Pablo desea declarar su amor por todos por igual, y no va a reconocer ningunas divisiones entre ellos. con gozo—El rasgo característico de esta Epístola, como el amor lo es en Efesios (cf. v. 18; Santiago 2:2, Santiago 2:19, Santiago 2:28; Santiago 3:1; Santiago 4:1, Santiago 4:4). El gozo da animación especial a las oraciones. Esto señala su alta opinión de ellos, de que tenían todo cuanto le daba gozo y casi nada de lo que le diese pena.

5. La razón de su hacimiento de gracias a Dios (v. 3): “Por vuestra comunión (continua; eso es, real participación espiritual) en (lit., “con respecto a”) el evangelio desde el primer día (de ser partícipes de él) hasta ahora.” Los creyentes tienen la participación del Hijo de Dios (1 Corintios 1:9) y del Padre (1 Juan 1:3, Joel 1:3) en el evangelio, al llegar a ser participantes de la “comunión del Espíritu Santo” (2 Corintios 13:14), y ejercen aquella participación por actos de comunión, no sólo en la comunión de la cena del Señor, sino también en la santa liberalidad para con los hermanos y los ministros (2 Corintios 4:10, 2 Corintios 4:15 : “comunión en razón de dar y recibir”; 2 Corintios 9:13; Gálatas 6:6; Hebreos 13:16 : “de la comunión no os olvidéis”).

6. confiado—Esta confianza da nervio a las oraciones y hacimientos de gracia (v. 3, 4). de estola misma cosa que él pide (v. 4) es el objeto de su confianza de creyente (Marco 11:24; 1 Juan 5:14). Por tanto, el resultado está asegurado. el que comenzó—Dios (1 Juan 2:13, Joel 2:13). la (una) BUENA OBRA—Toda obra que Dios empieza, por cierto la acabará (1 Samuel 3:12). Ni aun los hombres comienzan un trabajo al azar. Cuanto más el que Dios empiece una obra es garantía de que la terminará (Isaías 26:12). Así en cuanto a la obra aquí especificada, el perfeccionamiento de la comunión (participación) de ellos en el evangelio (v. 5; Salmo 37:24; Salmo 89:33; Salmo 138:8; Juan 19:28; Romanos 8:29, Romanos 8:35; Romanos 11:1; Hebreos 6:17; Santiago 1:17; Judas 1:24). Como Dios no ha rechazado a Israel para siempre pero los castiga por un tiempo, así tampoco repudiará al Israel espiritual (Deuteronomio 33:3; Isaías 27:3; 1 Pedro 1:15). el día de Jesucristo—la venida del Señor, indicada por Dios en todo tiempo de la iglesia para ser considerada como cercana, ha de ser la meta puesta en la mente de los creyentes más bien que la muerte de ellos.

7. justo sentir esto—tener la confianza que ya expresé (vv. 4-6). de todos vosotroslit., “en vuestro favor”. La confiada oración de Pablo a favor de ellos fué que Dios perfeccionase en ellos su propia obra de gracia. por cuanto os tengo en el corazón—(v. 8: “os amo”), no la otra lección. “Por cuanto me tenéis en el corazón … siendo compañeros de mi gracia” (tanto en mis prisiones como en la confirmación del evangelio). La segunda mitad del versículo asigna la razón por qué los tenía en el corazón (cf. 2 Corintios 3:2; 2 Corintios 7:3): aun en sus prisiones, y en su defensa y confirmación del evangelio (tal cual él hacía constantemente en privado, Hechos 28:17; su defensa de sí mismo y la confirmación del evangelio necesariamente siendo conjunto, como da a entender el griego; cf. v. 17), a saber, “por cuanto sois copartícipes de mi gracia”; por cuanto participáis conmigo en la “comunión en el evangelio” (v. 5), y lo habéis manifestado, tanto sufriendo como yo a causa del evangelio (vv. 28-30), como impartiéndome de vuestros bienes (Hechos 4:15). Es natural y justo que yo ore así confiadamente por vosotros [Ellicott, y otros traducen: “me es justo pensar así por vosotros”], a causa de que os tengo en mis afectuosos recuerdos aun en mis prisiones, por cuanto participáis conmigo en la gracia del evangelio. Las prisiones no encierran el amor.

8. La confirmación del v. 7. en las entrañas de Jesucristo—“Cristo Jesús”, según los manuscritos más antiguos. Mi anheloso amor (así infiere el griego) por vosotros no es meramente del afecto natural, sino de la abnegación a Cristo Jesús. “No Pablo, sino Jesucristo vive en Pablo; por tanto, no se conmueve en las entrañas (“tierno amor,” Jeremias 31:20) de Pablo, sino de Jesucristo.” [Bengel]. Todo verdadero amor espiritual no es sino una porción del amor de Cristo, que conmueve a todos los que están unidos a él [Alford].

9. El tema de su oración por ellos (v. 4). vuestro amor—a Cristo, que produce amor no sólo para con Pablo, ministro de Cristo, como hizo, sino también de los unos por los otros, aunque no abundaba tanto como debía (Jeremias 2:2; Jeremias 4:2). ciencia—más bien, “conocimiento”, de verdad doctrinal y práctica. conocimiento—más bien, “percepción”, “sentido perceptivo”. El discernimiento espiritual, oído espiritual, tacto espiritual, gusto espiritual. El cristianismo es una planta vigorosa, no un almácigo de entusiasmo. El “conocimiento” y el “discernimiento” evitan que el amor sea mal juzgado.

10. Lit., “Con el fin de vuestra prueba (y luego aprobación y apropiación) de las cosas sobresalientes” (Romanos 2:18); no solamente las cosas que no son malas, sino las mejores de entre las buenas. No preguntéis solamente si son dañinas, sino si hay algo de bueno, y cuáles son las mejores. sinceros—de una raíz griega. Probados a la luz del sol y hallados puros. sin ofensa—no tropezadores; que corréis la carrera cristiana sin caer a causa de algún tropiezo, o sea, tentación en vuestro camino. para el día—De modo que cuando llegue el día de Cristo, seáis hallados puros y sin ofensa.

11. frutos—Los manuscritos más antiguos leen “fruto”. Así Gálatas 5:22 (cf. allí). En cuanto a las obras de justicia, tan múltiples como sean, son como un todo armonioso,” el fruto del Espíritu” (Efesios 5:9); “el fruto de justicia” (Santiago 3:18. con Hebreos 12:11); “fruto para santificación” (Romanos 6:22). que son por (medio de) Jesucristo—al enviarnos él el Espíritu de parte del Padre. “Eramos acebuches inútiles mientras no estábamos injertados en Cristo, quien, por ser la raíz viviente, nos hace ramas fructíferas” [Calvino]

12. que sepáis—Los filipenses acaso temerían que el encarcelamiento de Pablo impidiera la extensión del evangelio; por tanto les quita este temor. cosas que me han sucedido—más bien: “las cosas tocante a mí”. más (bien) en provecho—tan lejos mis prisiones de impedir el evangelio. La fe toma en luz favorable hasta aquello que parece adverso [Bengel] (v. 19, 28; Romanos 2:17).

13. mis prisiones … célebres—notorias, manifestadas, como padecidas a causa de Cristo. pretorio—el cuartel de la guardia pretoriana anexa al palacio de Nerón, en la colina Palatino de Roma; no el campamento pretoriano general fuera de la ciudad porque éste no estaba conectado con “la casa de César”, lo que demuestra el 4:22 ser el pretorio aquí aludido. El emperador era el “pretor”, o comandante en jele; naturalmente, pues, el cuartel de su guardia era llamado “el pretorio.” Pablo parece que ya no estaba alojado en su propia casa, encadenado a un soldado, como en Hechos 28:16, Hechos 28:20, Hechos 28:30, sino bajo estricta custodia en el pretorio; cambio que se hizo probablemente cuando Tigelino llegó a ser prefecto pretoriano. Véase mi Introducción. y a todos los demás—No “en todos los demás lugares” (con Crisóstomo). “Célebres a todos los demás” soldados pretorianos, por la instrumentalidad de los estacionados como guardia del palacio del emperador. los que de tiempo en tiempo eran relevados sucesivamente por otros. Ya hacía como dos años que Pablo estaba preso en Roma, de modo que tiempo había pasado para que se conociese por toda la ciudad su causa y el evangelio.

14. muchos—más bien “los más de los hermanos en el Señor—lo que los distingue de “los hermanos según la carne”, los coterráneos … judíos. Ellicott, etc … traducen: “… hermanos, confiados en el Señor …” con mis prisiones—“tomando ánimo por mi paciencia en mis prisiones”.

15. “Algunos … predican a Cristo hasta por envidia;” es decir, para llevar a cabo la envidia que abrigaba hacia Pablo a causa del éxito del evangelio en la capital del mundo, debido a su firmeza en su encarcelamiento; trataban por envidia de transferir el crédito por el éxito de él a sí mismos. Eran probablemente doctores judaizantes (Romanos 14:1; 1 Corintios 3:10; 1 Corintios 9:1, etc.; 2 Corintios 11:1). algunos también por buena voluntad—eso es, de entre “los hermanos” (v. 14); bien dispuestos algunos para con él.

16, 17. Los manuscritos más antiguos trasponen estos dos versículos y leen: “Estos (últimos), a la verdad, por amor (a Cristo y a mí) sabiendo (lo contrario a “pensando,” en la frase que sigue) que estoy puesto (por Dios; 1 Tesalonicenses 3:3) por la defensa del evangelio (v. 7; no por causa mía). Pero los otros por contención (más bien “de un espíritu faccioso”; “maquinación”; un espíritu de intriga, usando de métodos inescrupulosos para lograr sus fines; Nota, Gálatas 5:20; “egoístas” [Alford], anuncian a Cristo no sinceramente (en línea con “de un espíritu de intriga”, “de interés propio”); Lit., “no puramente”; no con intención pura; la levadura judía la pretendían introducir con el fin de glorificarse a sí mismos (Gálatas 6:12; pero cf. nota, v. 18), pensando (pero en vano) suscitar (así leen los manuscritos más antiguos) tribulaciones a mis prisiones”. El pensamiento de ellos era que, aprovechando mi inmovilidad, se exaltarían por su predicación judaizante y harían que yo y mi predicación cayéramos en menosprecio, dándome así aflicción de espíritu en mis prisiones; pensaban que yo, como ellos, buscaba mi propia gloria, y así esperaban humillarme por sus éxitos superiores a los míos. Pero se equivocaban completamente; lejos de afligirme en eso, “en ello me huelgo” (v. 18).

18. ¿Qué pues?—¿con qué resultado? ¿Tal proceder me molesta, como ellos pensaban? que no obstante—sus malos pensamientos acerca de mí, y sus intenciones egoístas, la causa que llevo en mi corazón es adelantada “en todas maneras” de predicación, sea “por pretexto (con un motivo indigno, v. 16) o por verdad (de puro amor a Cristo, v. 17), Cristo es anunciado; y en esto me huelgo, y aun me holgaré.” De esto parecería que estos maestros mayormente “anunciaban a Cristo”, no predicando “otro evangelio”, como los judaizantes en Galacia (Gálatas 1:6); aunque tenían probablemente algo de la levadura judía (nota, v. 15, 16, 17), su error principal fué su motivo envidioso y egoísta, no tanto un error de doctrina; si hubiese habido algún error de principio, Pablo no se hubiera holgado en lo hecho. La proclamación de CRISTO, hecho como se hiciere, llamó atención, y así debió servir de seguro beneficio. Así era posible que Pablo se gozara del buen resultado de las malas intenciones de ellos (Salmo 76:10; Isaías 10:5, Isaías 10:7).

19. se me tornará a salud—“Esto me resultará para salvación”. Esta proclamación de Cristo de todos modos resultará en mi bien espiritual. Cristo, cuyos intereses son mis intereses, es por ello glorificado; y así se adelanta la venida de su reino, el que, cuando venga, traerá completa salvación (Hebreos 9:28) a mí y a todos aquellos cuya “mira y esperanza” (v. 20) es que Cristo sea en ellos ensalzado. La colaboración de ellos lejos está de causarme a mí aflicción en mis prisiones (v. 16) como pensaban. Es claro que Pablo cita las mismas palabras de la Versión de los Setenta (Job 13:16), y se las aplica a sí mismo: “Esto se me tornará a salvación”. por vuestra oración, y por la suministración del Espíritu—El griego une íntimamente los dos sustantivos, empleando una sola preposición y un solo artículo: “Por la oración vuestra y suministración (consiguiente) del Espíritu de Jesucristo” (obtenida para mí mediante vuestra oración).

20. Conforme a mi mira y esperanza—El griego expresa “la expectación con la cabeza alzada (Lucas 21:28) y el cuello extendido”. Romanos 8:19 es el único lugar del Nuevo Testamento donde la misma palabra aparece. Tittmann dice: “En ambos lugares significa no la mera expectativa, sino el ardiente deseo de algún feliz resultado anticipado en circunstancias aflictivas”. El objeto de anhelo y esperanza que sigue, corresponde a “mi salvación” (de v. 19). en nada seré confundido—en nada tengo por qué avergonzarme de “mi obra por Dios ni de su obra en mí” [Alford.] O “no seré nada defraudado en mi esperanza, sino que la realizaré plenamente” [Estio]. Asimismo el vocablo aquí traducido “confundido” se traduce “avergonzado” en Romanos 9:33. con toda confianza—“toda” en contraste con “en nada”, y “confianza”, con “confundido.” ahora también—mientras “mi cuerpo” esté “en prisiones” (v. 17). Cristo—no Pablo, “será engrandecido”. por vida, o por muerte—Sea cual fuere el asunto, yo no puedo perder; tengo que ser quien gane en lo que suceda. Pablo no era omnisciente; con respecto a las consecuencias de lo que les pasaba, los apóstoles experimentaban la misma prueba de la fe y paciencia que nosotros.

21. Porque—en todo caso (v. 20) yo saldré aventajado, “Porque para mí …” el vivir es Cristo—Todo cuanto tengo de vida, tiempo y fuerza, es de Cristo; Cristo es el solo propósito de mi vida (Gálatas 2:20). el morir es ganancia—No el acto de morir, sino como el griego lo expresa (“el haber muerto”), el estado después de la muerte. Además de la glorificación de Cristo mediante mi muerte, que es mi fin primordial (v. 20), el cambio de estado causado por la muerte, antes de ser asunto de vergüenza, confusión (v. 20), o de pérdida, como mis enemigos suponen, será una “ganancia” positiva para mí.

22. si el vivir … esto, etc.—“Pero si el vivir en la carne (si) esto (digo, la continuación en esta vida, la que estoy estimando en menos) es el fruto de (mi) labor (eso es, la condición en la cual está envuelto el fruto de mi obra ministerial), entonces qué escogeré no sé” (no puedo determinar conmigo mismo, si se me diese la oportunidad de escoger, pues las dos alternativas son igualmente buenas). Así Alford y Ellicott. Bengel lo entiende como en la versión inglesa, con lo cual el griego concordará si se supone la existencia de una elipsis: “Si el vivir en carne (es lo que me tocará), esto (continuar viviendo) es el fruto de mi obra”, eso es, esta continuación en la vida será la ocasión de “obra” que será su propia recompensa o “fruto”; o este continuar viviendo yo tendré este “fruto”, a saber, “obra” en Cristo. Grocio explica “el fruto de la obra”, como un idiotismo, como que “vale la pena” si vivo en la carne, valdrá la pena, pues así la causa de Cristo es adelantada, “Porque para mí el vivir es Cristo” (v. 21; cf. 2:30; Romanos 1:13). La otra alternativa, a saber, “el morir” la trataremos bajo el texto 2:17, “si soy derramado”.

23. Porque—Los manuscritos más antiguos leen: “Pero”, “No sé qué escoger (v. 22), PERO de ambas cosas estoy puesto en estrecho (perplejo) (a saber, vivir, o morir), teniendo deseo de ser desatado (lit., “soltar el ancla”, 2 Timoteo 4:6) y estar con Cristo”. lo cual—Según los manuscritos más antiguos: “PORQUE es mucho mejor”, o según el griego: “mucho más preferible”; una comparación doble. Esto refuta la idea de que el alma duerme durante el tiempo de su separación del cuerpo. Demuestra también que, mientras que consideraba que la venida del Señor estaba en todo tiempo cercana, la muerte suya, sin embargo, era una contingencia muy probable. La vida eterna parcial está entre la muerte y el segundo advenimiento de Cristo; el prefeccionamiento, a dicha segunda venida. [El obispo Pearson]. El irse es mejor que el quedarse en la carne; el estar con Cristo es muchísimo mejor; una esperanza neotestamentaria (Hebreos 12:24). [Bengel].

24. quedar en la carne—seguir viviendo algún tiempo más. por causa de vosotros—A fin de serviros a vosotros, estoy dispuesto a renunciar a mi algo apresurada entrada en la bienaventuranza; el cielo no dejará de ser mío, por fin.

25. Sé—por las intimaciones proféticas del Espíritu. No sabía aún el resultado, en lo que concernía a las apariencias humanas (Hebreos 2:23). El sin duda volvíó de su primer encarcelamiento a Filipos (Hebreos 13:19; Filemón 1:22). gozo de la fe—El griego: “vuestro gozo de fe”.

26. Tradúzcase: “Para que vuestro motivo de gloria (o de regocijo) en Cristo Jesús abunde en mí (es decir, en mi caso; con respecto a mí, o para mí, concedido que fuí a vuestras oraciones, v. 19) por medio de mi presencia (parousía, la presencia de uno que viene) de nuevo entre vosotros”. Alford hace que el asunto de gloria sea la posesión del evangelio, recibido de Pablo, que abundaría, que estaría asegurado y aumentaría por su presencia entre ellos; de modo que “en mí” significa que Pablo es el obrador del material del crecimiento en Cristo Jesús. Pero “mi gloria en vosotros” (Hebreos 2:16) claramente es paralelo a “vuestra gloria en mí” aquí.

27. Solamente—Pase lo que pasare en cuanto a mi venida a vosotros, tened esta sola preocupación. Con suponer ésta o la otra contingencia futura, muchos se persuaden de que van a ser tal cual deben ser; pero es siempre mejor sin evasión alguna cumplir los deberes presentes en las circunstancias presentes. [Bengel]. que converséis—Cf. 3:20: “Nuestra vivienda (griego, “cíudadanía”) está en los cielos”. El griego indica: “vuestra conducta de ciudadanos (eso es, del estado celestial; “la ciudad del Dios vivo,” Hebreos 12:22, “la Jerusalén celestial”, “ciudadanos conjuntamente con los santos,” Efesios 2:19) sea como es digno …” para que … oiga—“Oír” a fin de incluír las dos alternativas (“o sea que vaya … ausente”), debe llevar el sentido de saber. en un mismo espíritu—el fruto de la participación del Espíritu Santo (Efesios 4:3). unánimes—el griego: “en una misma alma”, la esfera de los afectos; subordinada al “Espíritu”, la naturaleza superior y celestial del hombre. “A veces hay antipatías naturales entre creyentes; pero éstas son vencidas cuando hay no sólo unidad de espíritu, sino también de alma” [Bengel]. combatiendo juntamente—con esfuerzo unido.

28. intimidados—“espantados”, lit., dícese de caballos o de otros animales súbitamente alarmados; también de consternación repentina en general. que—“lo cual,” el que no os aterroricéis.” indicio de perdición—si ellos siquiera lo quisieran percibir (2 Tesalonicenses 1:5). Atestigua esto que, al contender fatalmente contra vosotros, no hacen sino precipitarse a su propia perdición, sin hacer aflojar vuestra constancia y fe unidas. a vosotros de salud—Los manuscritos más antiguos leen: “de vuestra salvación”; no meramente de vuestra seguridad temporal.

29. Porque—más bien, una prueba de que esto es una señal evidente (“indicio”) de parte de Dios, de vuestra salvación, “porque”a vosotros es concedido—dado como un favor, o don de gracia. La fe es el don de Dios (Efesios 2:8), no operada en el alma por la voluntad del hombre, sino por el Espíritu Santo (Juan 1:12). creáis en él—“Creerle,” sería solamente creer que él habla la verdad. “Creer en él” (griego: eis auton, es poner la fe en él, creer obtener por él la salvación eterna. Padecer por Cristo no sólo no es una marca de la ira de Dios, sino antes un don de su gracia.

30. habéis visto en mí—(Hechos 16:12, Hechos 16:19, etc.; 1 Tesalonicenses 2:2). Yo en nada soy intimidado (aterrorizado) por mis adversarios (v. 28); tampoco debéis serlo vosotros.


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Filipenses 1

I. EL MISIONERO Y SUS DISCIPULOS, 1:1-11

La primera sección de Filipenses establece claramente la calidez de la relación entre el autor y los destinatarios, la cual es importante tomar en cuenta para comprender el contenido de toda la epístola.

1. Saludo y definición del ser cristiano, 1:1, 2

Siguiendo las fórmulas literarias de su tiempo Pablo inicia su carta con una referencia a sí mismo como el autor e incluye a Timoteo, quien al momento de escribir lo está acompañando, y quien también había formado parte del equipo misionero que inició la predicación del evangelio en Filipos. En otras cartas Pablo se presenta a sí mismo como “apóstol”, pero aquí el término que usa, siervos de Cristo Jesús (lit. “esclavos”) le permite incluir a Timoteo. Además concuerda con el espíritu de humildad que es un tema que predomina en la carta, y coincide con el hecho de que en Filipos aparentemente no se discute la autoridad apostólica de Pablo.

La ciudad de Filipos Sin ser la capital de la provincia de Macedonia, Filipos era su principal ciudad. Su importancia se debía a sus riquezas mineras, de las que sobresalía el oro y la plata. Pero, además, debía su fama a su estratégica situación geográfica, que constituía una verdadera puerta de entrada a Europa.

Estaba situada sobre la famosa Vía Ignacia, a unos 14 km. de la costa del Mar Egeo. Antiguamente su nombre había sido "Ciudad de las Fuentes". Fue más tarde que el rey Filipo, o Felipe, de Macedonia, padre de Alejandro el Grande, hizo en ella muchas mejoras. Y fue en su honor que se le puso el nombre de Filipos.

Tiempo después el emperador Augusto César la distinguió con el privilegio de ser una colonia romana, lo cual la eximía de pagar tributos y le daba una organización parecida a Roma. Así, pues, sus habitantes ostentaban la dignidad de ser ciudadanos romanos con sus consiguientes privilegios.

En respuesta al llamado del "Varón Macedonio", Pablo y sus compañeros de ministerio llegaron a Filipos para establecer una iglesia que amaba y lo amaba, y que lo apoyó y sostuvo en todo su ministerio. Fue, precisamente, una ofrenda enviada por esta iglesia a Pablo, estando él preso en Roma, y por medio de Epafrodito, lo que dio oportunidad al Apóstol de escribir esta singular epístola, de la cual emana profundo amor cristiano y gozo en Cristo.

La carta va dirigida a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos. Para Pablo, todos los creyentes están llamados a la santidad y son hechos “santos” por su relación con Cristo. La enseñanza sobre santidad tiene sus raíces en el AT que insiste en la santidad de Dios (Isa 6:3) y en el hecho de que el pueblo que pertenece a Dios está también llamado a ser santo (Lev 11:44; Lev 19:2; Lev 20:26), es decir a llevar un estilo de vida en obediencia a las demandas de Dios. Ese estilo distintivo es señal de una conciencia de pertenecer a Dios, y de estar por ello separado o apartado para vivir conforme al propósito divino. En el NT se describe de la misma manera la relación entre el creyente y Cristo. Esta relación transforma a la persona humana y le asigna una misión en el mundo, para la cual ha sido apartada. La expresión en Cristo que Pablo utiliza con mucha frecuencia se refiere precisamente a esa relación básica de salvación gracias a la obra de Cristo y, en consecuencia, de pertenencia a Cristo. Es la relación para la cual el lenguaje de Jesús en Juan 15 utiliza la metáfora de la vid y los pámpanos. Por eso también acierta Dios Habla Hoy cuando da como equivalente de la frase “en Cristo” la expresión “estar unido a Cristo”. Estar así en Cristo es entonces lo que define la esencia de la vida cristiana. La otra expresión en el Señor, que Pablo utiliza nueve veces en esta epístola, se refiere también a esta relación, pero carga el énfasis en las consecuencias de esta relación en la vida diaria (ver comentario a 1:14).

La referencia a todos los creyentes de Filipos viene antes de la frase con los obispos y diáconos. En la carta hay referencias específicas a los líderes de la congregación, sin embargo todos los santos están “con” ellos y no “bajo” ellos. Ya que se trata de una congregación mayormente gentil Pablo no usa aquí la expresión equivalente “ancianos” (presbúteros G4245), de raíz judía. En este punto es importante recordar que en el NT no hay ninguna indicación de que para Jesús o los apóstoles haya habido una idea de jerarquía institucionalizada, con la cual actualmente se asocian las palabras “obispos y diáconos” en algunas iglesias. Lit. las palabras se refieren más bien a la función, y como señala la nota de RVA, una traducción alternativa sería simplemente “con los que presiden y los que sirven”.

La salutación tradicional en el mundo grecorromano deseaba salud y alegría para el destinatario, mientras que la salutación judía recalcaba la paz (shalom). En su saludo Pablo combina elementos gentiles y judíos, gracia a vosotros y paz, pero le agrega un elemento nuevo y distintivo al especificar de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo. Lo que esto significa lo veremos desarrollado en el cuerpo de la carta, donde hay referencias a la paz de Dios (4:7, 9) y también una rica exposición acerca de la persona y la obra de Jesucristo, y su efecto y significado en la vida de los creyentes.

2. Una memoria edificante, 1:3-6

En las tres secciones que siguen Pablo va a mostrar cómo él recuerda a los filipenses (v. 3), lo que siente hacia ellos (v. 7) y el contenido de su oración por ellos (v. 9), ofreciéndonos así un retrato ejemplar de la actitud fundamental de un auténtico misionero. En las largas horas de la prisión, el Apóstol recuerda la iglesia que fundó en Filipos, y puede hacer memoria de personas y rostros que invariablemente lo mueven a gratitud: cada vez que me acuerdo de vosotros (v. 3) y a seguir orando por ellos con gozo y entusiasmo en cada oración. Esta memoria que anima, edifica y sostiene al misionero es más que el resultado de una simpatía afectiva. Pablo siente a los filipenses como compañeros de su labor y describe su relación con ellos usando un término de rico contenido teológico, vuestra participación en el evangelio. La palabra que aquí se traduce como “participación” es koinonía G2842, que otras versiones traducen “comunión”, es decir una relación de afecto y mutua pertenencia que deriva de la fe común en las buenas nuevas de Jesucristo.

El saludo de los cristianos 1:2

En la mayoría de sus cartas, Pablo usa un saludo característico, lleno de significado para los cristianos.

1. Gracia a vosotros...

Era la hermosa palabra griega u occidental, pero dando la connotación que esta palabra tenía. Gracia es el amor inmerecido de Dios, del que fuimos objeto al ser salvos. La relación del creyente con Dios es una relación de gracia. Pero también la palabra gracia se refiere al encanto, belleza y alegría que Cristo trajo a la vida.

2. Paz a vosotros. La palabra paz era usada comúnmente por los hebreos u orientales en el saludo. Pablo no la usa únicamente como saludo de protocolo. El anhelaba que la paz llenase sus corazones, como él mismo lo había experimentado en medio de las pruebas. Significando paz del alma, del corazón, de la conciencia. Paz que proviene de Dios nuestro Padre. Paz que llega a través de Cristo.

Gracia y paz, siempre en ese orden. Son vigentes aún en el mundo moderno, en medio de las circunstancias tan variadas de la vida actual.

Esta mutua pertenencia por la fe no es obra humana sino iniciativa divina (2:13) y se ha mantenido constante desde el primer día hasta ahora. El relato de Hechos recalca la iniciativa divina al narrar la conversión de Lidia, la primera creyente de Filipos, cuyo corazón abrió el Señor para que estuviese atenta a lo que Pablo decía (Act 16:14). De esta manera, la referencia a la fidelidad de los filipenses desde aquel día inicial va acompañada de la certeza respecto a la fidelidad de Dios. La convicción respecto a la fidelidad de el que en vosotros comenzó la buena obra, lleva a Pablo a afirmar con toda seguridad que esa obra llegará a buen término. La nota de plenitud o completamiento se expresa aquí en la traducción perfeccionará para el griego epiteléo G2005, cuya riqueza de significado puede también traducirse “la irá llevando a buen fin”, como lo hace Dios Habla Hoy. Esa plenitud se relaciona en este versículo con un tema que se repite de diversas maneras a lo largo de la carta: el día de Cristo Jesús. El autor parece dar por sentado que sus lectores entienden el término, de manera que no lo explica aquí. Pero hay toda una visión de la historia que ve el pasado, presente y futuro, y la propia vida, desde la perspectiva divina. Aquí como en todo su pensamiento Pablo refleja lo mucho que él depende de la herencia judía del AT dinamizada por la realidad de

Jesucristo. Para el AT Dios está en el comienzo mismo de la vida y de la historia humana, del universo y de la creación y sigue activo para completar su obra (Isa 48:12 ss.). Pablo ha tomado esta visión de la historia y la conecta con la venida de Cristo, quien aparece “en la plenitud del tiempo”. Ese Cristo, cuya obra va a ser magistralmente presentada en el cap. 2, es quien en el último día se manifestará como Señor y juez final y definitivo. El tiempo actual es tiempo de misión, con sus victorias y sus peripecias pero se vive a la luz de ese día final al cual Pablo alude repetidas veces y de diferentes maneras (1Co 3:13; 1Co 4:1-5; 2Th 1:10). Aquí Pablo puede aplicar esa visión al caso particular de los filipenses. Ha recordado el pasado, los comienzos de su vida como creyentes, refiriéndose al primer día, y ahora afirma su confianza en la victoria final del último día, garantizada por la acción de Dios mismo.

3. Comunión y añoranza,2Th 1:7-8

Pablo pasa ahora a reafirmar sus muestras de afecto por los filipenses al mismo tiempo que afirma cómo la memoria de ellos lo ha sostenido en la prisión. El sentir del v. 7 traduce el griego fronéo G5426, importante término que Pablo usa unas diez veces en esta carta (ver comentario en 2:5). Su cariño hacia los filipenses se ha ido construyendo como respuesta a las muestras específicas de amor fraterno que ellos le han hecho llegar (ver 4:15, 16) de manera que reafirma esa mutua pertenencia y dependencia de la gracia. Ellos han participado tanto de su sufrimiento como prisionero, como de su tarea misionera que no ha parado pese a su condición de tal. Aun desde su celda está ocupado tanto en un trabajo de proclamación apologética, defensa, como en el de discipulado y consolidación, confirmación del evangelio. El recuerdo de esta militancia común, hace que sin inhibiciones el Apóstol ponga a Dios como testigo para describir la añoranza que siente por ellos y que brota de un amor profundo mediado por Cristo Jesús. Esta es la que podríamos llamar una rica base afectiva sobre la cual son posibles tanto la tarea discipuladora como el nuevo desafío a un mayor crecimiento y abundancia. ¡Qué lejos está el Apóstol del frío profesionalismo de tantos ministros del evangelio y de la distancia social que suele separar a misioneros de nacionales!

4. La visión esperanzada del futuro, 1:9-11

La memoria y la añoranza llevan a Pablo a la oración intercesora. Aquí tenemos un resumen de lo que Pablo desea para los filipenses, y que en cierto modo es una síntesis de lo que va a desarrollar en toda la carta. Lo que constituyen sus peticiones en oración por los filipenses viene a ser un desafío a la plenitud y la madurez, un programa de crecimiento espiritual. En primer lugar (v. 9), que vuestro amor abunde, porque ya hay evidencia de que esta iglesia de Filipos tiene la marca del amor de Cristo, pero Pablo los desafía a ir más allá. Esto no significa el aumento de un sentimentalismo más efusivo, sino un amor que crece en conocimiento y en todo discernimiento. Usando nuestras imágenes tradicionales podríamos decir que no hay un contraste entre corazón y cerebro. Notemos que la abundacia del amor lleva a mayor sabiduría y claridad mental, capacidad para distinguir. Esa es precisamente la capacidad a la que se hace referencia en el v. 10, que como dice la nota de RVA podría traducirse también “para que podáis discernir lo que más vale”. Al comienzo de la vida cristiana se adquiere un discernimiento que permite escoger entre lo bueno y lo malo, pero llega un momento en la vida cristiana en que el gran dilema ya no es tanto entre lo bueno y lo malo, sino entre lo bueno y lo mejor. Eso requiere un discernimiento más agudo, señal de mayor madurez.

Una vida superior 1:10

1. Es una vida saturada de Cristo.

Es limpia, es amigable. Ama, perdona y sirve. Aprueba lo excelente y desecha lo inferior. Es fácil decidir entre lo bueno y lo malo. Más difícil es elegir entre lo bueno y lo superior.

2. Es una vida sincera.

Integra. Sin mezcla de impureza. La palabra proviene de los tiempos del Imperio Romano. En Roma se vendían templetes y objetos artísticos de mármol de una sola pieza. Pero algunos objetos tenían fisuras o defectos que se los emparejaba o disimulaba con cera y, una vez pulidos, semejaban ser íntegros pero, al sol, las imperfecciones se hacían visibles, o la cera se derretía. Otros eran "sinecera", sin cera. Estaban completos, sin faltas. Pablo pide que los cristianos vivamos vidas superiores, genuinas, verdaderas... sinceras.

3. Es una vida irreprensible.

Sin ofensa. Sin ser causa de tropiezo. Transparente. Vivir de tal manera que al llegar al día final no lleven la culpa de haber sido la causa por la cual otros tropezaron y cayeron.

Aquí la espiritualidad se relaciona directamente con la ética. La secuencia es clara: un mayor amor dará mayor discernimiento para poder llegar a ser irreprensibles, para no tener que temer un juicio adverso, no sólo desde el punto de vista humano, sino ante el juicio de Cristo mismo. Al mismo tiempo la vida no será una peripecia infructuosa sino una existencia fructífera. Como en todas las epístolas paulinas el fruto aquí no es algo cuantitativo que se pueda contabilizar como tantos convertidos o tantas horas pasadas en oración o tantas iglesias fundadas. Es más bien un fruto cualitativo, fruto de justicia. Además Pablo vuelve a reafirmar la iniciativa divina en este proceso, porque el fruto viene por medio de Jesucristo, y no busca la glorificación y la fama humana, sino la gloria y alabanza de Dios.

II. UNA MISION FRUCTIFERA, 1:12-26

La sección que sigue conecta con la anterior en forma muy propia del estilo paulino. Lo que enseña a sus discípulos, y espera de ellos, es lo que él mismo practica y ha visto realizarse en su propia vida: la unión indivisible entre práctica y teoría.

1. Peripecia del misionero y gloria del Señor, 1:12-20

En las epístolas de Pablo hay muchas referencias a sus sufrimientos y sus prisiones, pero cuando se las considera con detenimiento se percibe en el estilo que el móvil no es cierto masoquismo vanidoso. Ese es en particular el caso en esta sección en la cual la referencia a su prisión lleva una nota de regocijo y gratitud a Dios, y hasta de entusiasmo misionero. El v. 12 resume el efecto de sus peripecias: han redundado más bien para el adelanto del evangelio. Por un lado se ha hecho evidente que él no está en prisión como un delincuente común o un agitador social, sino por la causa de Cristo (v. 13), como un embajador en cadenas (Eph 6:20). De ello han tomado nota aun personas del Pretorio, término tomado del latín (praetorium), y que se refiere a la guardia especial o cuerpo de elite, encargada de cuidar la seguridad del emperador o los gobernadores. Entre todos los demás nos da a entender que la prisión de Pablo ha llegado a ser algo así como una cosa pública, bien conocida.

Por otro lado, y quizás precisamente al ver la indoblegable actitud de Pablo y la fuerza de su testimonio, la mayoría de los hermanos han tomado ánimo en el Señor y se han atrevido a predicar sin temor (v. 14). Que la prisión y el sufrimiento del misionero venga a ser fuente de valor y estímulo para la acción de los discípulos es algo que demuestra el cambio de perspectiva que brota de la relación con Cristo. Aquí aparece por primera vez la expresión en el Señor, que en esta epístola Pablo usa más veces que en ninguna otra, para referirse a una variedad de acciones y actitudes vinculadas a la relación fundamental con Cristo (Eph 2:19, Eph 2:24; Eph 3:1; Eph 4:1-2, Eph 4:4, Eph 4:10). Las expectativas y los planes respecto al futuro, la alegría por la riqueza de las relaciones fraternales, la resolución de las diferencias entre los hermanos, todo es posible gracias a esa relación con el Señor.

Ser ciudadano romano Augusto César hizo de Filipos una colonia romana, adoptando todas las costumbres, estilos y leyes que imperaban en Roma. Aún el idioma era romano. Al derecho de ser ciudadano romano se tenía acceso por haber nacido en Roma o en una de sus colonias. La ciudadanía también se conseguía por honores militares, o se compraba (ver Act 22:28). Act 16:20-21 denota el orgullo que este derecho confería a quien lo ostentaba. Pero, además, proporcionaba ventajas en la vida social, por la exención de ciertos impuestos, derechos civiles tales como ser castigado con azotes o ser detenido por la autoridad sin haber sido juzgado (ver Act 16:37-40 y 22:25-29). Podían, además, ejercer el derecho de ser juzgados en Roma misma o apelar al César (ver 25:10-12). Una ventaja importante de ser ciudadano romano era la posibilidad de viajar y desplazarse por todo el Imperio sin dificultad y amparado por la ley romana.

En este punto Pablo hace algo así como un pequeño paréntesis penoso. Sus sufrimientos no son causados sólo por los enemigos de fuera de la comunidad cristiana, sino también por rivales de dentro. Como para que no tengamos falsas ilusiones o visiones de color de rosa sobre la iglesia primitiva nos encontramos con esta referencia a predicadores que predican a Cristo por envidia y contienda (comp. con 2:3). A éstos Pablo atribuye la intención de añadir mayor aflicción a lo que él ya sufre como prisionero. Sin embargo, así como sus cadenas han tenido un efecto beneficioso desde el punto de vista de la misión, así también él busca el lado positivo de esta rivalidad interna, y afirma su regocijo ante el hecho de que de todas maneras Cristo es anunciado, sea por pretexto o sea de verdad (v. 18). Nótese que la RVA hace primero referencia a los que predican por amor (v. 16) y en segundo lugar a los que lo hacen por contención (v. 17). En este aspecto, y a diferencia de otras traducciones, sigue el orden de los manuscritos más antiguos ahora disponibles que corresponde mejor al estado de ánimo de Pablo que el texto comunica.

Hay algo sin embargo que es causa de mayor alegría, y es la esperanza de su liberación. El Apóstol parece tener base para pensar que su causa judicial, quizá su apelación ante el César, va a tener un resultado positivo. Este sentir lo atribuye tanto a las oraciones de los filipenses como a un apoyo y convicción que viene por obra del Espíritu de Jesucristo. Para Pablo cada fase de la misión cristiana es posible sólo por la acción del Espíritu. Ya hicimos referencia a la dirección del Espíritu en la misión para la entrada en Filipos (ver Introducción). La conversión de personas a Jesucristo es por acción del Espíritu (comp. Act 16:14 con 2Co 3:17 y 4:5, 6). Como en la sección anterior aquí también Pablo hace referencia al tiempo y a la fidelidad de Dios para no pasar vergüenza sino más bien tener plena confianza. No es sólo optimismo humano sino seguridad de que lo que acontezca con su cuerpo, su propia vida o su propia muerte, servirá de instrumento para exaltar a Cristo. Pablo está poseído de un realismo optimista, porque aunque la muerte parece rondar en el curso de la epístola y hay varias referencias a ella, lo que está claro es que el Apóstol no le tiene ningún temor; para él es como una serpiente o un escorpión que ya no tienen su aguijón letal (1Co 15:55-57).

2. Vivir y morir por Cristo,1Co 1:21-26

La referencia a sus prisiones y el posible desenlace de su situación como preso del Señor lleva a Pablo a escribir con el corazón en la mano, sacando a luz la riqueza de las convicciones íntimas que dan sentido a su vida. Si la vida está entregada a Cristo y se vive para su gloria, la muerte no es una amenaza ni causa terror (v. 21). Notemos los dos términos de este versículo clásico que ha inspirado a tantos: para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia. Esta es la fibra de la que están hechos los pioneros de Cristo en todas las épocas. No se trata de una actitud de resignación, sino primero de una afirmación gozosa de plenitud de vida en Cristo, desde la cual la muerte se ve con una perspectiva diferente, como una ganancia. Cabe preguntarse: ¿Qué clase de ganancia? ¿En qué sentido se estaría ganando algo? Si una persona ya está “en Cristo” y goza de las bendiciones de esa relación que da sentido a su vida, la muerte no significa el fin de esa relación sino más bien la entrada en la plenitud de la misma. El hilo del pensamiento conecta naturalmente con la afirmación del versículo que sigue. Para Pablo hay una seguridad de que la muerte es sólo una partida que conduce a estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor (v. 23).

Sin embargo, Pablo expresa un tremendo deseo de seguir viviendo una vida útil y fructífera, especialmente al servicio de aquellas personas que quiere, como los filipenses (vv. 22, 24). De allí viene su dilema, sintiéndose como tironeado desde direcciones opuestas por ambos anhelos. Esta seguridad final y esta orientación básica de la vida están claras para él. Contra ese trasfondo, sin embargo, afirma su convicción presente de que Dios le va a conceder más tiempo para ministrar entre los filipenses (v. 25). Y una vez más, sin inhibiciones ni falsas modestias, expresa su convicción de que su presencia va a beneficiar mucho a los filipenses (v. 26). La presencia y la ausencia del Apóstol entre los filipenses va a ser un elemento muy importante de su razonamiento en la sección que sigue.

Cristo, realidad viviente 1:21

Cada cristiano ha de preguntarse: ¿Es Cristo una realidad viva en mi vida? ¿Es él el factor básico en mi ser? ¿Puedo ver su presencia divina en cada tormenta, en cada relámpago, en cada trueno estremecedor? ¿Puedo percibirle en la luz brillante del sol como en la noche oscura iluminada por la luna y las estrellas? ¿Le veo y le palpo a mi lado en las horas de tragedia y en las que la alegría y la belleza me rodean?

Si Cristo es así una realidad viviente, podré cantar gozoso en medio de las crisis y vislumbrar el cielo azul entre las nubes negras de la adversidad, la soledad y la tristeza.

Cuando el corazón está en estrecha relación con el Señor, cuando Jesucristo es el factor principal detrás de todos los detalles de la vida, se puede experimentar alegría y paz en todas las circunstancias de la vida, así como el poeta y el músico se inspiran y motivan en la fiereza de la tempestad o en el susurro del agua que corre y desciende entre las piedras del arroyo al pie de la montaña. Cristo, la realidad viviente, hará la diferencia en la vida que se abre a su llenura y plenitud.

III. LA MISION : COMUNION Y TESTIMONIO, 1:27-2:18

Esta larga sección constituye el meollo de la epístola. Dentro de ella ocupa un papel central el himno cristológico (2:5-11), pero es importante captar la unidad de todo el pasaje. Esta se advierte si colocamos en columnas paralelas los versículos con los cuales se inicia y se completa esta sección:

1:27, 28 2:12-18

presencia y ausencia del apóstol presencia y ausencia del apóstol

salvación y perdición salvación

creer y sufrir sufrimiento

conducta ciudadana luminares en el mundo

En medio de estos dos pasajes que recalcan algunos temas comunes está la referencia a Cristo, que le sirve como centro y eje, de manera que tenemos una sincronía típica del estilo de Pablo.

1. La agenda de la iglesia : unidad y testimonio, 1:27-30

La presente traducción (RVA) ofrece una versión diferente y más clara de la exhortación del Apóstol en el v. 27: procurad que vuestra conducta como ciudadanos sea digna del evangelio. En la palabra griega polítes G4177, que significa ciudadanía, encontramos la raíz pólis G4172, que efectivamente hace referencia a la ciudad. El verbo politéuomai G4176 se traduce lit. “conducirse como ciudadano”. Como se ha señalado en la Introducción, los filipenses eran muy conscientes de su ciudadanía y de los privilegios y responsabilidades que ella implicaba en vista de la situación especial de que disfrutaba Filipos como colonia romana. Esta es la imagen que Pablo usa ahora para referirse a las altas exigencias éticas del evangelio, la calidad de vida a la cual llama la fe en Cristo. Recurre de nuevo a esta familia de palabras en 3:20. Los valores del evangelio no se viven en la soledad de un convento en el desierto sino en medio mismo de la ciudad.

Queda claro entonces que la aceptación del evangelio no convierte a las personas en seres antisociales a quienes no les importa lo que pasa en el mundo que los rodea. Las demandas éticas del evangelio se expresan en una conducta ciudadana ejemplar, aunque en este pasaje Pablo no entre en detalles respecto al contenido de esa conducta. El relato de Hechos ofrece una interesante ilustración de este punto en la conducta de Pablo durante su misión en Filipos. La conversión de la muchacha adivina trajo como consecuencia un disturbio violento en la ciudad y el encarcelamiento de Pablo y Silas, seguido de la conversión del carcelero (Act 16:16-34). Luego de dicha conversión los jueces mandaron unos guardias a ordenar la liberación de Pablo y Silas, pero el Apóstol se negó a salir de la cárcel. Adujo que las cosas no se habían hecho conforme a la ley, deslindó responsabilidades y protestó porque se habían violado sus derechos de ciudadano romano (Act 16:37) El incidente terminó cuando los jueces admitieron su error y se disculparon ante Pablo y Silas, yendo personalmente a liberarlos (Act 16:38-39). Todo hace pensar que Pablo actuó teniendo en cuenta la situación legal de la iglesia que quedaba en Filipos, ya que no era bueno que tuviese como antecedente policial el haber sido fundada por un agitador y promotor de disturbios. La práctica del misionero refleja aquí sensibilidad pastoral y también clara conciencia de cómo conducirse como ciudadano. Hay un tono paternal en la referencia a que no es necesaria la presencia del Apóstol para que los filipenses se porten bien. Desde la distancia espera saber que están firmes en la lucha (ver comentario a 2:12).

El tema del conflicto conecta con el contraste que establece 2:15 entre la calidad de vida propia de la iglesia que es como la luz y la sociedad ambiente que es como las tinieblas. En 1:27, 28 la referencia al contraste es menos explícita pero igualmente clara y utiliza las ideas de salvación y perdición. El cristiano sabe que está en medio de una batalla pero no se debe dejar asustar o intimidar por los adversarios. Para poder enfrentar al mundo hostil el Apóstol aconseja por un lado el cultivo de la unidad: firmes en un mismo espíritu. Por otro lado enseña que es necesaria la disposición a sufrir por causa de Cristo, tomando el sufrimiento como un privilegio. Y aquí regresa a su propia práctica, a su propio sufrimiento y valentía en el conflicto. El término griego aquí traducido conflicto es agón G73, del cual deriva la palabra agonía, que no quiere decir únicamente los estertores previos a la muerte, sino como el filósofo español Miguel de Unamuno destacaba, la vida misma como un continuo combate. Esa vida de Pablo como una verdadera lucha los filipenses pudieron verla cuando él y sus colaboradores llegaron por primera vez a Filipos, y ahora a la distancia oirán noticias por Epafrodito y por la propia carta que les envía. Esa es la agenda que el Apóstol propone: unidad interna y testimonio valiente hacia afuera.




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Filipenses 1

Filipenses 1:25

Tener esta confianza - Este “yo sé” del apóstol tiene algo parecido a su paralelo con el de Lutero, cuando su amigo y verdadero compañero de yugo, Melancthon, estaba al borde de la muerte.

El reformador, se dice, después de una ferviente oración se acercó al lecho del enfermo y pronunció estas palabras proféticas: “Anímate, Felipe; no vas a morir ". Lutero no estaba profetizando en ningún sentido, pero había estado orando; y en respuesta a su oración, la convicción fue irresistiblemente arraigada en su mente y corazón, de que su colega, a quien le esperaba tanto trabajo, viviría para hacerlo. Lo que, entonces, por convicción personal Lutero afirmó acerca de otro, Pablo lo afirma aquí acerca de sí mismo.

Por tanto, vemos que la humildad y la confianza combinadas, más especialmente en las naturalezas fuertemente emocionales, pueden atreverse a veces a usar el lenguaje audaz de la convicción segura incluso con respecto a asuntos que para nosotros son inciertos, porque están solo con Dios. Pero debe notarse que este lenguaje nunca puede usarse cuando se trata de fines meramente personales o privados. Cuando Pablo dijo "Yo sé" en este caso, de hecho estaba aludiendo a su propio futuro, pero lo estaba contemplando en relación no con sus propios intereses individuales, sino únicamente con el "progreso y gozo en la fe" de sus amigos. -su avance en la vida interior mediante el fortalecimiento de la fe, y su gozo, como desbordamiento de esa fe, en su vida exterior de servicio cristiano. Todo esto sería de ellos por su presencia restituida por un tiempo, más que por cualquier carta, por tierna que sea, podría escribirles. (J. Hutchison, DD )

Filipenses 1:27-30

Solo permita que su conversación sea como se convierte en el evangelio de Cristo.

Un llamado a una manifestación cuádruple de vida espiritual

I. A la santidad ( Filipenses 1:27 ). Como si hubiera dicho, tengo un deseo dominante en referencia a ti.

1. Es bueno saber lo que los príncipes de Dios desean para nosotros. El deseo más noble que un hombre puede tener por otro es ser como Jesús.

2. Hay una sola vida ideal en la Iglesia. Pero aquí hay una dificultad: ¿cómo puede la más baja copiar a la más alta? ¿No habría sido más prudente haber presentado a un hombre que sobresaliera en un rasgo moral y haber dicho: "Transcribe eso", y así sucesivamente hasta que todas las gracias se hubieran adquirido gradualmente? ¿No es exorbitante el establecimiento de la perfección absoluta y exige demasiado del pecador indefenso? Dejanos ver.

¿En qué comienza la perfección moral? Comienza en la disposición, la voluntad, el corazón. Si se le insta a escapar del invierno polar al verano tropical, no significa que el viaje deba realizarse a pasos agigantados, sino paso a paso. Cuando se requiere que un niño sea perfecto como músico, no se pretende que en un día sus torpes dedos liberen las tensiones del ángel. Lo mismo ocurre con el crecimiento de la bellota en el roble.

Y así, cuando nuestro Salvador nos dice que seamos perfectos como nuestro Padre celestial es perfecto, quiere decir que debemos crecer en gracia. En todo nuestro crecimiento y esfuerzo, Cristo mismo está con nosotros, y Su gracia es todo suficiente.

II. A la unanimidad ( Filipenses 1:27 ). Esto no es monotonía. La raíz de la verdadera unidad es la unidad en el amor y el servicio de Cristo. La cristiandad es en realidad una, aunque aparentemente muchas. El abrigo es de muchos colores, el corazón es uno. Esto se ve particularmente en tiempos de amenaza de peligro. Los ejércitos de defensa nunca han venido de ningún sector particular de la Iglesia.

Qué ilógica la decisión de no tener nada que ver con la religión porque la Iglesia está dividida. Hay tantos estilos de construcción y tantas modificaciones de esos estilos, algunos dóricos, otros clásicos: ¿está la gente tan perpleja con estas variedades como para renunciar por completo a la arquitectura y decidirse a residir al aire libre? Intente lo mismo con la ropa, el patriotismo, los negocios. ¿Los hombres abandonan el comercio porque algunos comerciantes son insolventes? ¿Renuncias a la limpieza porque algunas chimeneas fuman?

III. Al coraje ( Filipenses 1:28 ). La timidez es un síntoma de debilidad moral, un impedimento en el camino del progreso moral. La timidez de uno puede desanimar el coraje de una multitud. Surge de la desconfianza en Dios. Cuántos hombres de nobles poderes y cultura ampliada, por falta de fuerzas en una crisis, el coraje de pronunciar la palabra decisiva, fracasa y tiembla, y se convierte en presa de los mezquinos.

IV. La intrepidez en la contienda debe asociarse con la magnanimidad en la perseverancia ( Filipenses 1:29 ). Los fuertes de corazón están llamados a sufrir. El sufrimiento es una educación, un medio de gracia. Piense en el heroísmo oculto y silencioso que ocurre día a día. ¡Cuántos hombres de otra manera poderosos fracasan en el sufrimiento! ( J. Parker, DD )

Ciudadanía cristiana

Había un inconveniente en el deleite del apóstol al pensar en los filipenses. No fue una falta de solidez doctrinal o la negación de su autoridad, sino el espíritu de rivalidad social y partidismo. Esto lo insinúa por la repetición de la palabra "todos" en la primera parte de este capítulo, y ahora lo trata de la manera más delicada pero eficaz. Él muestra, de una manera que ellos, como ciudadanos romanos, entendieron rápidamente, los deberes principales de la ciudadanía evangélica y sus motivos para hacer cumplir.

I. Los deberes de esta ciudadanía cristiana.

1. Manténganse firmes en el estatuto de su ciudadanía - el evangelio - todos ustedes, todos juntos. Sea un cuerpo compacto. El apóstol enfatiza el espíritu cristiano como resultado de la fe cristiana, y no sueña, como algunos hombres recientes, que uno puede existir separado del otro.

2. Sea unánimemente celoso por la fe común. El celo por la verdad no es solo impulsarlos a defender la verdad, sino también darla a conocer. Hay un celo que comienza y termina con uno mismo, o que se manifestará sólo a su manera, y un celo que se gasta no tanto contra el enemigo común como contra los de su propio partido que difieren en cosas menores. Lo que el apóstol elogia es un tipo correcto de celo correctamente dirigido.

3. Sea valiente al enfrentar a su enemigo. La oposición fue formidable: judíos y gentiles individualmente y combinados; era probable que el ataque fuera repentino.

II. Los motivos por los que se hacen cumplir.

1. La atención a estos deberes atestigua su verdadero aprehensión y disfrute del cristianismo mismo ( Filipenses 2:1 ).

2. El poder del amor divino.

3. La obediencia a esos deberes dará testimonio de la realidad de su comunión con Dios.

4. Es también, por tanto, un verdadero testimonio de la compasión y la ternura que sólo Cristo pone en el corazón de los hombres.

5. Haciendo esto, harás rebosar mi copa de alegría. ( JJ Goadby. )

Ciudadanos del cielo

El significado es: Juega al ciudadano de una manera digna del evangelio. Pablo no quiere decir, por supuesto, cumplir con sus deberes cívicos como hombres cristianos, aunque algunos ingleses cristianos necesitan ese recordatorio; pero su ciudad era la Jerusalén celestial.

I. Mantener fresco el sentido de pertenencia a la ciudad madre. Pablo escribía desde Roma, donde podía ver cómo la conciencia de ser romano daba dignidad a un hombre. Encendería un sentimiento similar en los cristianos.

1. Pertenecemos a otra política distinta a aquella con la que estamos conectados por los lazos de los sentidos.

2. Por lo tanto, es una gran parte de la disciplina cristiana mantener una viva conciencia de que existe un orden invisible de las cosas. La vida futura está presente para una innumerable empresa.

3. Existe una conexión actual entre todos los cristianos y la ciudad celestial. La vida de los cristianos en la tierra y en el cielo es fundamentalmente la misma; en principio, motivo, gusto, finalidad, etc. Como Filipos lo fue para Roma, así es la tierra para el cielo, una colonia en las afueras del imperio, rodeada de bárbaros y separada por mares, pero manteniendo abiertas sus comunicaciones, y una en ciudadanía.

4. Nuestro verdadero hábitat está en otra parte; Pongamos, pues, nuestro afecto en las cosas de arriba. Los descendientes de los colonos originales en nuestras colonias todavía hablan de venir a Inglaterra como "volver a casa", aunque nacieron en Australia y han vivido allí toda su vida.

5. ¿Cómo es necesario que ese sentimiento de desapego del presente entristezca nuestro espíritu o debilite nuestro interés por las cosas que nos rodean? Reconocer nuestra separación del orden de cosas en el que nos "movemos" porque "tenemos nuestro ser" en ese orden majestuoso invisible hace que la vida sea grande, no pequeña.

II. Viva según las leyes de la ciudad.

1. Los colonos de Filipos se regían por el código de Roma. No debían obedecer la ley de la provincia de Macedonia. Por tanto, los cristianos no deben regirse por máximas y reglas de conducta que prevalezcan en la provincia, sino en la capital.

2. El evangelio no es sólo para creerlo, sino para obedecerlo. Como algunas de las antiguas cartas municipales, la concesión de privilegios y la proclamación de la libertad es también el código soberano que impone deberes y da forma a la vida. Un evangelio de pereza y mera exención del infierno no es el evangelio de Pablo.

3. Esa ley es suficiente. En Cristo tenemos el ideal realizado, el ejemplo impecable, y en lugar de mil preceptos, todo deber se resuelve en uno: ser como Cristo.

4. Viva digno del evangelio, entonces. Cuán grandiosa la unidad y la sencillez que se infundió en nuestros deberes.

5. Un precepto tan completo no es una mera generalidad desdentada. Deje que un hombre intente honestamente moldear su vida con él, y pronto descubrirá lo cerca que lo atrapa. La pequeña ronda de la gota de rocío está formada por las mismas leyes que moldean el planeta gigante.

6. Es un mandamiento exclusivo, que excluye la obediencia a otros códigos, por muy comunes o de moda que estén. Nos gobiernan desde casa y no nos sometemos a las autoridades provinciales. No importa lo que la gente diga de ti, o cuáles sean sus máximas o sus costumbres. Las censuras o alabanzas de los hombres no tienen por qué conmovernos. Reportamos a la sede y las estimaciones subordinadas no tienen por qué ser nada para nosotros. Apelamos al César.

III. Lucha por el avance de los dominios de la ciudad.

1. Como las colonias armadas que Roma tenía en su frontera, que recibieron sus parcelas de tierra con la condición de mantener la frontera contra el enemigo y empujarla hacia adelante una legua o dos, así los soldados cristianos se establecen para ser "guardianes de la marchas ”y para

(1) mantente firme, manteniendo nuestro terreno y rechazando todos los asaltos.

(2) Esta resistencia exitosa debe ser en un solo espíritu, ya que toda resistencia depende de que nuestros espíritus estén arraigados en el Espíritu de Dios, en unión vital con quien podamos unirnos en una unidad que opondrá un rompeolas de granito a la marea que se precipita. de oposición.

(3) Debemos llevar la guerra hacia adelante, luchando juntos por la fe del evangelio.

(4) Debe haber disciplina y organización compacta como la de los guardias pretorianos.

(5) La causa por la que debemos luchar es la fe del evangelio, ya sea su suma y sustancia o el acto subjetivo de confianza en él, para luchar unidos por su creciente poder en nuestro propio corazón y en el corazón de los demás. .

2. Tal trabajo es siempre necesario, y nunca más que ahora, cuando una ola de incredulidad parece pasar sobre nosotros, y cuando la comodidad material es tan atractiva. Cierra tus filas para la pelea.

IV. Esté seguro de la victoria.

1. "Aterrorizado" se refiere a un caballo que se asusta o se lanza a algún objeto. Por lo general, son las cosas que se ven a medias y se confunden con algo espantoso, lo que hace que los caballos sean tímidos; Por lo general, es una media mirada a los adversarios y una estimación errónea de su fuerza lo que atemoriza a los cristianos. Sube a tus miedos y háblales y, como se dice que hacen los fantasmas, generalmente se desvanecerán.

2. Tal valor se basa en una esperanza segura. "Nuestra ciudadanía está en el cielo". La colonia periférica sabe que el Emperador marcha en su auxilio. ( A. Maclaren, DD )

Solicitud ministerial

I. La metáfora apropiada. La Iglesia es una ciudad asentada sobre una colina. La mente divina ha gastado infinitos tesoros en ella. Es una obra maestra de perfección. Su fundamento es Cristo.

1. Esperamos ver el orden en una ciudad: entonces debe haber leyes y gobierno en la Iglesia.

2. Debe haber belleza en una ciudad: por tanto, toda excelencia debe estar en la Iglesia.

3. En una ciudad esperamos comercio; por lo que la Iglesia debe enviar sus mercancías a todas partes.

4. En una ciudad imperial buscamos la residencia del soberano, y este es el consuelo de la Iglesia: "El Señor de los ejércitos está con nosotros".

5. Como es una ciudad, es un lugar de privilegios acreditados: los obsequios del monarca reinante.

II. La dirección general. ¿Qué les dice este venerable ciudadano a sus conciudadanos? No es la profesión de ciudadanía la que servirá.

1. Con respecto a sus principios: Dios dio a Su Hijo para que muriera por ustedes rebeldes; por tanto, le debes la vida.

2. Deje que su conversación sea como corresponde a los privilegios del evangelio: cuán variada y rica son.

3. Sea como conviene a la santa práctica requerida por el evangelio. “Deja que tu luz brille”, etc.

III. La enumeración particular.

1. Firmeza. Nunca conocí a un hombre que siempre cambiara cuya piedad fuera profunda y sincera. Sea firme en su apego a

(1) su propia Iglesia;

(2) sus doctrinas;

(3) su disciplina.

2. Unidad

(1) de juicio;

(2) de cariño.

3. Energía y actividad. ( T. Mortimer, MA )

El deseo de un ministro en nombre de su pueblo

I. Tenemos un deber. Somos ciudadanos de ninguna ciudad Filipenses 3:20 ( Filipenses 3:20 ; Hebreos 12:23 ). Qué privilegio indescriptible; nuestro deber es Efesios 4:1 ( Efesios 4:1 ; 1 Tesalonicenses 2:12 ).

(1) Que se vea en su vida que son hombres de principios distintos a los del mundo.

(2) Actuando sobre principios distintos a los de ambición, tranquilidad, egoísmo.

(3) Al ser hombres de otros hábitos ( Filipenses 3:18 ) - ajenos al mundo, espirituales: en el hogar, en los negocios, etc.

2. Recuerde que la gloria del evangelio está relacionada con la conversación de sus profesores. Se te ha confiado un tesoro; no lo empañes, lo pierdas, lo trueques.

II. Se especifican algunos detalles de nuestro deber. "Que estéis firmes". Es fácil para un hombre ser obstinado y firme en mantener sus propias opiniones; pero la dificultad para un hombre es mantenerse firme en el evangelio, a saber.

1. En un solo espíritu: una unión constante de afecto ( Hechos 1:14 ; Hechos 2:46 ), sin discordia ni discordia.

2. Con un solo espíritu por la fe común. Cuando se ataca la opinión de un hombre sobre las cosas del mundo, qué dispuesto está a defenderla, pero qué fría indiferencia hay sobre los principios cristianos.

III. El deseo expresado por esta conversación evangélica. "Solamente." Paul parece haber perdido de vista otros temas; solo déjame ver esto y seré feliz. Esto fue integral de todo lo demás. ( T. Woodroffe. )

Ciudadanía

(Texto junto con Filipenses 3:20 .) Pablo era ciudadano romano. En virtud de esto, se poseerán derechos, privilegios e inmunidades negados a los extraños. Ahora lo convierte en una cuenta espiritual.

I. Los verdaderos creyentes son ciudadanos del cielo. Aquí son forasteros y peregrinos. Sus pensamientos y afectos apuntan a la Jerusalén celestial. Pero no pueden decir con Paul: "Nací libre". Como el capitán, “Con una gran suma obtuvieron esta libertad” ( 1 Pedro 1:18 ). Es el interés del creyente en Cristo, comprador de su libertad, lo que lo constituye ciudadano del cielo.

II. Los ciudadanos del cielo deben reflejar en sus vidas la dignidad y santidad de su ciudad. Como hijos reales, deben comportarse con realeza. No esperamos un comportamiento principesco en los mendigos, y solo buscamos una mentalidad terrenal en los ciudadanos de la tierra. Cuando se le pidió a Alexander que participara en los Juegos Olímpicos, respondió: "Lo haré si los reyes han de ser mis antagonistas".

III. Las leyes del cielo para la vida de sus ciudadanos en la tierra están contenidas en el evangelio de su rey. La única gran ley de la que todos los demás son aplicaciones particulares es "Cristo nuestra vida". “Nos dejó un ejemplo”.

IV. Las vidas que armonizan e ilustran estas leyes son dignas del cielo al que pertenecen. Lecciones:

1. Premie el privilegio.

2. Estudie las leyes.

3. Viva la vida. ( JB Norton. )

La conversación se convierte en el evangelio

Considere -

I. El evangelio en ...

1. La dignidad que confiere.

(1) Lo que somos por naturaleza: hijos de la ira, extranjeros, esclavos del pecado.

(2) Lo que somos por gracia: hijos de Dios, ciudadanos del cielo, reyes y sacerdotes para Dios.

2. El conocimiento que comunica.

(1) El misterio de la piedad: Dios manifestado en carne.

(2) El "misterio del evangelio" - la unión entre Cristo y su pueblo.

(3) El misterio relacionado con la resurrección.

(4) El "misterio de iniquidad".

(5) El misterio de la providencia: "Todas las cosas ayudan a bien", etc.

(6) Los "misterios del reino".

3. El espíritu que ordena. La paz con Dios, la alegría, el amor de Dios, la manifestación de la misericordia que disfrutamos, caminando en el amor, sin mancha.

II. Las ventajas que conlleva.

1. Firmeza. Circunstancias cambiantes, herejías, mundanalidad, prueben esta estabilidad.

2. Unidad.

(1) Cada soldado individual debe recordar que pertenece al ejército.

(2) Para esta unidad debe haber consistencia personal y valor individual de la verdad. “Una mente”, es decir, la que estaba en Cristo Jesús.

(3) Esfuerzo mutuo.

3. Celo por el éxito de la verdad.

(1) Defendiendo su pureza.

(2) Extendiendo sus bendiciones. ( W. Cadman, MA )

La conversación se convierte en el evangelio

I. ¿En qué debe convertirse nuestra conversación en el evangelio?

1. La doctrina del evangelio. Viviendo como los que creen

(1) Que Cristo es el Hijo de Dios y hombre ( Juan 1:14 ).

(2) Que murió por el pecado, incluso por el nuestro; que resucitó, ascendió y vendrá de nuevo para juzgar al mundo.

2. La disciplina del evangelio. Que todo se haga

(1) Decente y en orden ( 1 Corintios 14:40 ).

(2) En la fe ( Romanos 14:23 ).

(3) Enamorado ( Efesios 5:2 ).

(4) En humildad ( Filipenses 4:1 ; Lucas 17:10 ).

(5) Para la gloria de Dios ( 1 Corintios 10:31 ; Mateo 5:16 ).

3. Nuestras expectativas del evangelio. Viva como los que esperan ( 1 Juan 3:4 ) -

(1) Perdón ( Efesios 1:7 ).

(2) Aceptación ( Gálatas 2:16 ).

(3) Paz con Dios ( Romanos 5:1 ).

(4) Gozo en el Espíritu Santo ( Romanos 14:16 ; 1 Pedro 1:8 ).

(5) Todas las gracias del Espíritu ( 1 Pedro 2:9 ).

(6) Una alegre resurrección ( 1 Corintios 15:52 ).

(7) Felicidad eterna.

4. Nuestra profesión del evangelio, para lo cual tenemos estas reglas.

(1) Al apartarse de la iniquidad ( 2 Timoteo 2:19 ).

(2) En ser nuevas criaturas ( 2 Corintios 5:17 ).

(3) Amar a Cristo sobre todas las cosas ( Lucas 14:26 ).

(4) En negarnos a nosotros mismos, tomar nuestra cruz y seguir a Cristo ( Mateo 14:24 ).

(5) En dar mucho fruto ( Juan 15:8 ).

(6) En ser santo en toda forma de conversación ( 1 Pedro 1:15 ); en pensamiento ( Proverbios 12:5 ; Filipenses 4:8 ); en los afectos ( Colosenses 3:2 ); en palabras ( Santiago 1:26 ; Efesios 4:29 ); en acciones ( Tito 2:11 ).

(7) Amarnos unos a otros (Jn 42:35).

(8) Continuando hasta el final ( Juan 8:31 ).

II. ¿Por qué andar como conviene al evangelio?

1. De lo contrario, somos una vergüenza para el evangelio ( Hebreos 6:6 ).

2. Enemigos de Cristo ( Filipenses 3:18 ).

3. No recibirá ningún beneficio del evangelio ( Hebreos 4:1 ).

4. El evangelio se levantará en juicio contra ti ( Juan 3:19 ).

5. Pero si caminas como conviene al evangelio, todas sus promesas te serán cumplidas ( Juan 1:29 ; Juan 14:2 ; Mateo 25:34 ).

III. ¿Qué conversación es la que se convierte en evangelio?

1. Hacia Dios.

(1) Una conversación humilde ( Efesios 4:1 ; Mateo 11:29 ).

(2) Confiado.

(3) Alegre ( Filipenses 4:4 ).

(4) obediente.

(5) Celestial ( Filipenses 3:20 ).

2. Hacia el hombre.

(1) Manso y humilde ( Mateo 11:29 ).

(2) Amar ( Juan 13:34 ).

(3) Justo ( Mateo 7:12 ).

(4) Caritativo ( 1 Timoteo 6:17 ).

IV. Usar. Andad así según el evangelio.

1. Motivos.

(1) Esto es más seguro ( Proverbios 10:9 ).

(2) Más rentable ( 1 Timoteo 6:18 ; Santiago 2:5 ).

(3) Muy honorable ( 1 Samuel 2:30 ).

(4) Muy agradable ( Proverbios 3:17 ).

(5) Lo más necesario ( Lucas 10:42 ) para la felicidad ( Hebreos 12:14 ).

2. Medios.

(1) Escudriñar las Escrituras.

(2) Ordenanzas frecuentes ( Romanos 10:17 ).

(3) Sea mucho en oración ( Santiago 1:5 ).

(4) Medita con frecuencia (cap. 4: 8).

(5) Viva por encima de sus cuerpos ( 1 Corintios 9:27 ). ( Obispo Beveridge. )

La conversación se convierte en el evangelio

I. Una conversación que se convierta en el evangelio debe ser sabia, porque el evangelio es un sistema de conocimiento. Por eso se llama luz. Hay tres estados con respecto al conocimiento del evangelio.

1. Los paganos son hijos de la noche.

2. Los judíos tenían algo de luz.

3. Los cristianos son hijos de la luz y del día. Los cristianos deben sobresalir en este sentido.

II. Una conversación que se convierta en el evangelio debe ser alegre, porque el evangelio es un sistema de gozo.

1. Como tal, fue predicho.

2. Los resultados alegres siguieron universalmente a su establecimiento.

3. No ha perdido nada de su poder de bendecir.

(1) En servicio.

(2) En juicios.

(3) Muerte.

III. Una conversación que se convierta en evangelio debe ser santa, porque el evangelio es un sistema de santidad.

1. No hay santidad en la teoría ni en la práctica fuera. Pero--

2. El evangelio

(1) lo enseña;

(2) lo requiere;

(3) lo produce.

IV. Una conversación digna del evangelio debe ser caritativa, porque el evangelio es un sistema de benevolencia. Nada es más impropio para él que un temperamento egoísta y codicioso. ( W. Jay. )

Consistencia cristiana

I. Pablo “suplicó por una Iglesia cristiana consistente. La vida del cristiano debe armonizar con su credo. Su vida debe caracterizarse por:

1. Veracidad. Dios es el autor de la verdad; el Espíritu Santo, el espíritu de verdad; el evangelio la palabra de verdad; y el cristiano debe ser un hombre de verdad.

2. Amor. Este es el primer y gran mandamiento en la evidencia del discipulado, la inspiración del deber, y se debe tanto a los enemigos como a los amigos.

3. Santidad en pensamiento, deseo y acción.

II. Por una Iglesia unida. Con frecuencia se exhortaba a los primeros cristianos a ser uno en fe, sentimiento, espíritu y acción; el vínculo debía ser amor, y el fin, el establecimiento del evangelio. Esta unión era necesaria ...

1. Para resistir a sus adversarios comunes, que fueron y son combinados, persistentes, poderosos.

2. Desarrollar sus gracias cristianas. Nuestras mentes y corazones se ensanchan con la relación de hombres buenos. El valiente anima al tímido, el sabio instruye al ignorante, el fuerte protege al débil. Las múltiples diversidades de nuestra naturaleza y condición constituyen la perfección de la Iglesia, como miembros del cuerpo.

3. Establecer la verdadera fe. El éxito del todo depende del acuerdo de las partes.

III. Para una Iglesia celosa. Los cristianos deben permanecer al margen, luchar, sufrir e incluso morir unos con otros.

1. Este celo se exige por un objeto noble.

(1) Debemos luchar, no por un lugar, poder o popularidad, sino ...

(2) Por la fe: mantener su pureza en nuestros propios corazones y difundir su influencia de gracia por el mundo.

(3) El comerciante es celoso en los negocios, el estadista en la política, el cristiano en la fe.

(4) Esto nunca se necesitó más que ahora.

2. El objeto inspira el celo. Llama a ejercitar nuestras más altas facultades; informa el juicio, somete la voluntad, santifica los afectos y ennoblece el alma. Ha hecho más por la raza que todos los moralistas o filántropos que han existido.

3. Este celo debe ejercerse con un espíritu encomiable, "juntos". Los cristianos no deben luchar unos contra otros. El cristiano sincero no tiene tiempo para debates inútiles. Cultive el espíritu de simpatía fraternal. ( GJ Procter. )

Consistencia cristiana

I. ¿Cuál es ese comportamiento que se convierte en profesor del evangelio de Cristo?

1. Con respecto al mundo.

(1) No debe adorar a su dios: Mammón (Mateo 6:24; 1 Juan 2:15 ; 1 Timoteo 6:9 ).

(2) Debe evitar su compañía ( Salmo 1:1 ; 2 Corintios 6:14 ).

(3) Debe evitar sus placeres y modas ( Romanos 12:2 ). Es cierto que Cristo asistió a las bodas de Caná, etc., pero había buena gente allí, y fue para manifestar Su gloria; pero quien haya oído que la gloria de Dios es promovida en fiestas de naipes, etc.

2. Con respecto a sus sentimientos predominantes.

(1) Paz.

(2) Fe.

(3) Esperanza gozosa.

(4) Paciencia y alegre aquiescencia.

(5) Coraje.

3. Con respecto al pecado.

(1) No debe cometerlo.

(2) Debe odiarlo.

(3) Debe luchar contra ella en todas las formas y en todas partes.

4. Con respecto al objetivo y negocio de su vida. Promover la gloria de Dios ( Mateo 5:14 ; 1 Corintios 10:31 ).

II. Por qué debería mantenerse tal comportamiento.

1. Porque Filipenses 2:1 a los que velan por sus almas ( Filipenses 2:1 ; Filipenses 4:1 ).

2. Por la ventaja - “el testimonio en ti mismo” de tu conversión.

3. Porque prepara la mente para la temporada de aflicción y las solemnidades de la muerte.

4. Porque es la voluntad y el mandamiento de Cristo.

Conclusión:

1. El mundo observa y juzga atentamente el carácter y la conducta de los profesores. La falta de coherencia en los cristianos ha hecho más daño al cristianismo que todos los desvaríos de los infieles.

2. Los ojos de Dios están constantemente sobre nosotros.

3. El alegato de no ser profesor no será un alegato en la hora de la muerte por una vida pecaminosa. ( I. Spencer, DD )

Consistencia cristiana

I. El carácter general de la coherencia cristiana.

II. Sus requisitos especiales.

III. Primordial importancia.

IV. Resultados gratificantes. ( J. Lyth, DD )

I. Cuál es la conducta que se convierte en evangelio.

1. Debe ser el resultado genuino de las disposiciones del evangelio. La conducta es el nacimiento de los principios; lo que se ve en la vida es el desarrollo de lo que existe en el corazón. El árbol debe ser bueno antes de que el fruto pueda ser bueno. Pero no debemos juzgar completamente por la apariencia exterior. No todo lo que brilla es oro. Un espectáculo justo en la carne no es nada a menos que el corazón esté bien con Dios. El evangelio endereza el corazón.

2. Debe mantenerse bajo la influencia de los principios del Evangelio y en el uso de las ordenanzas del Evangelio. Todo puede deteriorarse; instituciones, edificios, metales del más fino brillo, cristianos de la más exaltada piedad. Debemos vivir por fe, por el amor de Dios en el cumplimiento de sus mandamientos, por la atención a los medios de la gracia.

3. Debe parecerse a los patrones del evangelio. El evangelio no es una colección de máximas y doctrinas, sino una exhibición de ejemplos. "Sígueme como yo sigo a Cristo".

4. Debe ajustarse a los preceptos del evangelio. El evangelio no es simplemente una oferta de misericordia y una promesa de bendición. La ley no se invalida por la fe. Donde se da mucho, se requiere mucho. El epítome de estos preceptos es "vivir sobria, justa y piadosamente en el mundo presente".

II. ¿Qué obligaciones tenemos para mantener esta conducta?

1. Dios lo requiere. Con este fin ha dado Su revelación. “No todo el que dice: Señor, Señor”, etc. La voluntad de Dios es justa y ninguna criatura puede resistirla impunemente.

2. La coherencia lo requiere. Profesión sin práctica es hipocresía. Las acciones hablan más que las palabras. “Que todo aquel que invoca el nombre de Cristo se aparte de la iniquidad”.

3. Nuestra comodidad personal lo requiere. “Nuestro regocijo es el testimonio de nuestra conciencia”. Sin esta paz es un engaño.

4. Nuestra conexión con la sociedad lo requiere. Le debemos a la sociedad lo que no podemos pagar adecuadamente sino con las bendiciones de la vida del evangelio.

5. Nuestra salvación final lo requiere. Seremos juzgados según nuestras obras.

Conclusión:

1. Qué excelente es la religión cristiana.

2. Cuán iliberal e irrazonable censurarlo a causa de sus profesores inconsistentes. ( R. Treffry. )

El Evangelio

El poder en la vida de un cristiano : -

I. Qué es el evangelio.

1. Es el evangelio de Cristo porque:

(1) Él es el autor de la misma.

(2) La médula y la médula de la misma.

(3) El finalizador de la misma. Es propiedad suya, glorifica su persona, es dulce con el olor de su nombre.

2. Es el evangelio de Cristo. Buenas noticias.

(1) Elimina los peores males: el pecado, la muerte, el infierno.

(2) Trae las mejores bendiciones: reconciliación con Dios, buena voluntad en la tierra, felicidad eterna en el cielo.

II. Nuestra conversación debe ser tal que se convierta en el evangelio. El evangelio es ...

1. Simple. Así que deberíamos estar en nuestra vestimenta, nuestro habla, nuestro comportamiento. Dondequiera que encuentres al cristiano, no deberías querer una llave para él. Debería ser un hombre transparente como Nathaniel y "como niños pequeños".

2. Verdadero. Oro sin escoria. Así debería estar el cristiano en su discurso. No debe haber escándalos, juramentos, equívocos y menos aún mentiras.

3. Sin miedo. Llama a las cosas por su nombre correcto, y es exactamente lo contrario de lo que ahora se llama caridad. Sea honesto y valiente en su profesión y acción,

4. Suave. El mal genio es bastante contrario al evangelio. Tiene corazón de león, pero mano de dama.

5. Amar. Sin amor, el cristiano es como bronce que resuena.

6. Misericordioso. Las personas duras o miserables no se convierten en el evangelio.

7. Santo. El cristiano debe ser santo como Cristo es santo.

III. La severa necesidad de una conversación que se convierta en el evangelio.

1. Si no vives así, harás sufrir a tus compañeros inocentes. Tientas a otros y desacreditas a toda la Iglesia.

2. Haces sufrir a tu Señor. El mundo pone tu pecado a la puerta de tu religión.

3. Derribarás todo el testimonio que hayas dado de Cristo. ¿Cómo pueden creerle sus hijos, vecinos, etc. si actúa de manera inconsistente? ( CH Spurgeon. )

La conducta cristiana se compone de pequeñas cosas

Asegúrese de que los sentimientos, pensamientos y acciones de cada hora sean puros y verdaderos; entonces tu vida será así. El laberinto más poderoso de magníficas armonías que jamás haya dado un Beethoven al mundo, no es más que notas individuales, y todas sus tensiones complicadas y entrelazadas se pueden resolver en individualidades. La amplia pradera no son más que brotes de hierba separados; la flor cubierta de sábanas de las praderas pero flores aisladas.

Esforzándonos juntos por la fe del evangelio.

1. La frase “fe en el evangelio” tiene un significado distintivo en el Nuevo Testamento. Se refiere a la revelación divina de la misericordia y el amor en el Hijo de Dios, y su aceptación mediante una confianza sincera y penitente. Está relacionado con una larga vida de profecías precedentes, servicios simbólicos, el constante anhelo del mundo por un Redentor y la esperanza mesiánica de los judíos.

2. Este mensaje de redención se encuentra con infinitas formas de aceptación y rechazo.

(1) Al principio su promulgación entró en contacto con el paganismo como religión, y naturalmente acusó a la oposición de los orgullosos sistemas de error.

(2) Luego entró en contacto con el paganismo como filosofía, y la orgullosa razón del mundo clásico buscó analizar sus misterios.

(3) A toda forma de pensamiento religioso y a cada fase de la vida intelectual ha llegado durante dieciocho siglos a ser rechazado por los orgullosos, pero aceptado por los mansos.

3. Una de las cuestiones vitales del día es cómo afrontar y superar esta oposición.

I. El púlpito es naturalmente llamado a requisar.

1. ¿ Pero ha de ser profesor de filosofía? Entonces su función es luchar con las dudas, antagonizar la incredulidad del día. Pero esta actitud es sólo negativa, y profundizar en los variados asaltos sería sólo publicitarlos y difundirlos.

2. El verdadero negocio del púlpito, como lo define la Escritura, es predicar a Cristo ya Él crucificado, y mediante la proclamación de la verdad positiva allí, la incredulidad del día se enfrentará mejor.

II. La prensa compite con el púlpito en la educación de la multitud. Aquí la incredulidad encuentra expresión plena y sistematizada, pero también puede y también lo hace el cristianismo. La perdición y el antídoto coexisten, y los ataques escépticos a lo largo de toda la línea de la fe han sido repelidos en la literatura actual. Aquí las objeciones científicas pueden ser y son enfrentadas por hombres científicos.

III. Pero la vida cristiana individual es la mejor defensora de la fe. La unión de los cristianos en la conversación que se convierte en evangelio hará invencible la fe. ( WA Snively, DD )

Medios de ayuda a la propagación del evangelio

I. La fe del evangelio. “La fe que una vez fue entregada a los santos”, “la verdad como es en Jesús”: a saber:

1. La verdad sobre Dios. Su unidad y triple personalidad.

2. Sobre el hombre: su caída y ruina.

3. Acerca de la redención: la Encarnación y Expiación de Cristo; la aceptación de la salvación por fe; regeneración y santificación por el Espíritu Santo.

4. Sobre la inmortalidad.

II. La importancia del lenguaje del apóstol al respecto. Los filipenses deben luchar juntos por ello. El evangelio era un depósito precioso; debían mantenerlo firme en oposición a todos los que les robaran; debían preservarlo en su pureza original, en oposición a quienes buscaban adulterarlo. Pero no debía ser un tesoro escondido, ni apropiado exclusivamente por ellos mismos, sino que debía ser comunicado a sus semejantes.

1. Todos los cristianos pueden y deben ayudar a difundir la fe del evangelio. Algunos piensan que esto es asunto de los ministros. Pablo les dijo a los "santos", así como a los obispos y diáconos que lo hicieran. Los cristianos pueden hacer esto.

(1) Cultivando la pureza de corazón y de vida y manteniendo un comportamiento ejemplar. Este método está aprobado por Cristo mismo: "Deja que tu luz brille". Su eficacia puede ilustrarse con numerosos hechos. Este fue el método principal de propagación del evangelio en los tiempos apostólicos y cristianos primitivos. Gibbon coloca las virtudes de los cristianos entre sus "causas secundarias". Así que hoy. Los mayores enemigos de la Cruz son los cristianos inconsistentes.

(2) Por contribuciones pecuniarias. Muchos sobrevaloran el dinero; algunos lo subestiman: la verdad es que es un talento para ser empleado por Dios. Dios te ha dado el poder y la oportunidad de conseguirlo. Conságralo, pues, a Él. La proporción debe dejarse a la conciencia. Los más pobres no deben desanimarse, porque Dios valora el ácaro de la viuda, cuando es la ofrenda de una mente dispuesta. Dejemos que las iglesias modernas tomen el ejemplo de la Iglesia de Filipos.

(3) Por unión y cooperación. Las ventajas de esto son obvias. Vemos esto en los negocios y la política, y en las sociedades filantrópicas y religiosas. Entonces, ¿por qué diferencias menores deberían separar a los cristianos? Las divisiones son una fuente de debilidad; la Unión es Fuerza.

(4) Con oración humilde, importuna y creyente. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento prescriben esto como un medio para promover la fe. Que esto se recuerde en la oración pública, privada y familiar. Es un medio que Dios se complace en honrar.

2. En esta buena obra, los cristianos deben ser celosos. "Esforzarse" como los competidores en los juegos. Nada es más ofensivo para Cristo que la tibieza.

(1) El trabajo necesita el esfuerzo más arduo. Tiene que luchar con la oposición más inveterada y formidable, del corazón malvado y de los sistemas malignos.

(2) Es digno de ellos. Trae gloria a Dios, el mayor bien para el hombre y honra al Redentor. ( J. Thomson, DD )

Unidad y acción

I. El objeto por cuya perpetuidad va a cooperar. Todo el evangelio, no sus promesas, ni sus preceptos, ni sus doctrinas por sí solas, y mucho menos cualquier punto de vista particular relacionado con ellos, como el calvinismo o el arminianismo. Tenemos que luchar por la fe, no por un fragmento de ella. ¿Por qué los cristianos deben luchar juntos por esto?

1. Porque son los únicos que lo entienden y lo valoran. Por la gracia del Espíritu, ven su valor. Para ellos, Cristo lo es todo. Su evangelio es el libro de sus corazones. No pueden dejar de amar lo que es precioso. Para otros, puede resultar aburrido.

2. Porque a ellos se les conceden sus honorables privilegios. Sus privilegios religiosos se convierten en deberes como consecuencia de sus obligaciones para con Aquel que los había salvado. Sus deberes se convierten en privilegios como consecuencia de su baja: para Aquel que los amó primero.

3. Porque los enemigos del Maestro están alerta y activos.

II. La posición que debes mantener. Era necesario que asumieran la posición de una falange unida. Dios nos lo había asignado a nosotros. Simplemente debemos “permanecer firmes en un solo espíritu” en él. Tienes las verdades del Evangelio, mantenlas unidas. Dividir y vencer es la política del adversario; cierra tus filas y la victoria es nuestra. "Todo reino dividido contra sí mismo no permanecerá".

III. La unidad de propósito que debes apreciar.

1. Sea unánime sobre el tema de la unidad misma.

2. Sobre el tema de la oración social: "Si dos de ustedes están de acuerdo, etc."

3. Respecto al ministerio mutuo: Apoya a tus pastores y ámalos.

4. Haciendo el bien a todos los hombres. ( W. Leask, DD )

Párate rápidamente

La palabra στήκετε en el original significa aferrarse y mantenerse firme en el puesto, y se deriva de los combates, en los que cada uno se esfuerza por mantener su lugar y mantenerse en su asiento, sin retroceder ni ser sacudido. por todos los ataques del enemigo. El apóstol, al emplear esta imagen para representarnos la vida de los fieles, quiere decir que en esta guerra espiritual nunca debemos dejarnos sacar de esa posición en la que Dios nos ha puesto, y que todos juntos, como sus fieles y Valientes soldados, rechazando valientemente al enemigo, debemos permanecer siempre firmes, sin renunciar ni a la fe ni a la profesión que por su gracia hemos hecho. ( J. Daille. )

Luchando juntos

Como un luchador lucha contra su antagonista y se esfuerza por dominarlo, el cristiano debe luchar contra todo enemigo de la verdad. ( GJ Procter. )

Concordia en la Iglesia

Como no hay cuerpo ni sociedad más noble que la Iglesia, tampoco hay ninguno en el que la unión y la concordia sean más necesarias. Ustedes son engendrados de la misma simiente, es decir, del evangelio, criados en la misma familia, alimentados con el mismo alimento, animados por el mismo espíritu, destinados a la misma herencia. Si tantos lazos estrechos no pueden unirlos, de todos modos permita que esta guerra común en la que están comprometidos, este peligro común que corren y estos enemigos comunes con los que luchan, extingan sus diferencias y los hagan unirse por su común. preservación y defensa.

A menudo, entre los reinos de la tierra, el miedo a un enemigo externo se detiene en los malentendidos y las disputas internas. Imitemos a este respecto la prudencia de los niños de este mundo. Cualquier cosa que tengas de sabiduría o coraje, vuélvela contra el enemigo. Que sólo él sienta el vigor de tu brazo y la punta de tus armas. No es contra tu hermano que se los emplee. Están hechos, y te han sido dados, para defenderlo y no para herirlo; para preservar y no para derramar su sangre.

Lo digo con pesar, no es más que nuestra división, hermanos míos, lo que ha impedido la derrota del enemigo y el triunfo de la Iglesia. Si hubiéramos luchado todos juntos, hace mucho que deberíamos haber sido conquistadores. ( J. Daille. )

Filipenses 1:28

En nada aterrorizado por tus adversarios

Coraje

I. La necesidad de ella.

II. Las pruebas de ello.

III. La ventaja de ello; es señal de perdición para tus enemigos, de salvación para ti. ( J. Lyth, DD )

I. Tus adversarios son numerosos, poderosos, terribles, pero sin duda perecerán.

II. Tu salvación está cerca, segura, gloriosa y la de Dios. ( J. Lyth, DD )

Una señal evidente de perdición.

Muestras de perdición

Perdición significa ruina desesperada. Una ficha es una premonición. El mundo natural está lleno de advertencias. Un cambio en la atmósfera o en el orden de las cosas, un desastre o un gran acontecimiento que se avecina, es presagiado por ciertos fenómenos, que una larga experiencia y observación saben interpretar. Así también en las esferas política, social, moral y religiosa. Tan evidentes son estas señales para el perspicaz que no es difícil predecir el futuro.

Según este principio, Pablo interpreta la conducta de los adversarios. Y todo predicador del evangelio tiene la garantía de aceptar ciertos rasgos de carácter y desarrollos de depravación como "evidentes señales de perdición" en aquellos en quienes se encuentran, y presentarlos como advertencias, "faros" en el mundo. Permítanme especificar algunas de esas señales, no de las clases infieles o abiertamente inmorales, sino de la clase de pecadores respetables y que van a la Iglesia.

I. Un estado de insensibilidad moral habitual en el trascendental e infinitamente interesante asunto de la salvación.

II. Una conciencia tranquila y dormida, bajo la luz del sol de la Biblia, y los llamamientos fieles y escrutadores de los embajadores de Dios.

III. Las convicciones de pecado se pierden y recaen en mayor descuido e insensibilidad que nunca, después de un período de interés religioso.

IV. Pasados ​​y sin ser molestados en sus pecados - abandonados, puede ser, para burlarse y oponerse - cuando el Espíritu Santo de Dios ha sido enviado con gran poder para despertar y convertir almas y recoger la cosecha.

V. Donde los castigos providenciales fallan en su fin, y, en lugar de humilde y penitente sumisión y reconocimiento lloroso de la mano de Dios en ellos, hay un orgulloso e inquebrantable espíritu de amargura. Ahora bien, donde aparecen tales cosas, la "perdición" está cerca; la ira final es inminente; las últimas arenas de esperanza están cayendo; ¡El toque de la desesperación está listo para sonar! ( Homilética Mensual. )

Muestras de perdición

I. Una falsa esperanza de piedad. Hay muchos que se engañan a sí mismos con una religión falsa, y mientras tienen un nombre para vivir, están muertos.

II. Depravación prematura. Aunque el principio del pecado es inherente a todo pecho humano, alcanza una exuberancia más temprana y más alta en algunos casos que en otros.

III. Inversión en la transgresión. La fuerza casi invencible del hábito es un tema de observación universal.

IV. Creencia confirmada de error destructivo. La confianza que los devotos del error depositan en sus engaños es muy diferente en diferentes personas. Para algunos, es poco más que un anhelado deseo de que su sistema fuera cierto.

V. Prosperidad mundana no santificada.

VI. Apatía de la mente bajo el castigo divino.

VII. Vuelve a la insensibilidad después de impresiones serias.

VIII. Una vejez impenitente. ( Edad cristiana. )

Hombres no aterrorizados

John Noyes, besando la estaca, dijo: "Bendito sea el momento en que nací para este día". A sus compañeros mártires les dijo: "No perderemos nuestras vidas en este fuego, sino que las cambiaremos para mejorar, y las brasas tienen perlas". Hugh Laverocke, consolando a John-a-Price, su compañero mártir, le dijo: “Tenga buen consuelo, hermano mío, porque mi señor de Londres es nuestro buen médico. Él te curará de toda tu ceguera ya mí de mi cojera de este día.

”Joyce Lewis -“ Cuando contemplo el feo rostro de la muerte, tengo miedo; pero cuando considero el rostro amable de Cristo, vuelvo a cobrar ánimo ”. John Huss le dijo a un compatriota que le arrojó un maricón a la cabeza: “¡Oh, santa sencillez, Dios te envíe mejor luz! Ahora asas el ganso, pero un cisne vendrá tras de mí y escapará de tu fuego ". Huss, un ganso en lengua bohemia; y Lutero, un cisne.

Castilia Rupea - “Aunque arrojes mi cuerpo por esta empinada colina, mi alma volverá a subir. Tus blasfemias ofenden más mi mente que tus tormentos a mi cuerpo ". Doctor Taylor, cuando iba al martirio: "Hoy engañaré a los gusanos en el cementerio de Hadley", y dando un salto o dos cuando llegó a dos millas de Hadley, "Ahora", dijo, "me faltan dos estilos, y hasta estoy en la casa de mi Padre ".

En nada asustado

La interpretación de la versión revisada ha sido elegida con mucho gusto. La palabra se usa para los caballos que se asustan ante cualquier objeto inusual o inesperado. Los creyentes tienden a tener mucho miedo; pero luego está implícito en la palabra usada que, después de todo, un susto o pánico repentinos pueden surgir de una causa insignificante. Es lo que no tiene por qué molestar. Sea lo que sea lo que causa la alarma, se ve impotente, incluso se desvanece cada vez que se lo aborda con valentía.

Todas estas pruebas para el pueblo de Dios son como los leones en el camino estrecho que conduce al Palacio Hermoso de la alegoría de Bunyan. Estaban encadenados mientras el Peregrino los veía, pero él no lo sabía. Por lo tanto, solo tienen que acercarse con valentía, y entonces se oye la voz de Vigilante: “No temáis a los leones, porque están encadenados y colocados allí para la prueba de fe donde está, y para el descubrimiento de los que no la tienen. Mantente en medio del camino, y no te vendrá mal. " ( J. Hutchison, DD )

Filipenses 1:29-30

A ti te es dado en nombre de Cristo

Compañerismo con los mártires y confesores

I. Como la fe.

II. Como conflictos.

III. Como el honor. ( J. Lyth, DD )

La vida del cristiano es

I. Una vida de fe. Esta fe es ...

1. El regalo de Dios - "te es dado".

2. Un don particular otorgado a un pueblo en particular, que lo distingue de todos los demás. El cristiano sabe y disfruta de lo que nadie más hace.

II. Una vida de sufrimiento.

1. La vida de Cristo estaba llena de ella y, por lo tanto, también la del creyente.

2. Algunos sufrimientos que comparte con la humanidad a la que pertenece,

3. Algunas pruebas son peculiares del cristiano que surgen de

(1) pecado;

(2) la dificultad inherente a la vida cristiana;

(3) profesión ante el mundo;

(4) abnegación;

(5) consistencia en los negocios, etc .;

(6) la oposición de los enemigos del evangelio.

III. La vida del sufrimiento prueba la vida de la fe. Otros son rebeldes o estoicamente resignados; el cristiano se inclina por amor a Cristo y es apoyado por Cristo en respuesta a la fe. ( JW Reeve, MA )

Los dones de dios

I. Qué son. El poder de creer, de sufrir.

II. Su inestimable valor.

1. La fe trae paz, gozo, justicia.

2. El sufrimiento paciente trae liberación, conquista, gloria. ( J. Lyth, DD )

A ti te es dado creer

I. La fe es un don de Dios. Él proporciona el suelo, los medios, el poder.

II. Se te ha dado. Puedes aceptar el terreno, usar los medios, ejercer el poder.

III. ¿Hasta qué punto lo has mejorado? No se puede alcanzar el punto de vista superior antes que el inferior; cada uno tiene una medida de habilidad; por tanto, arrepiéntete, cree. ( J. Lyth, DD )

A ti te es dado sufrir

Dios te da

I. La oportunidad.

II. El poder.

III. El honor.

IV. La recompensa del sufrimiento por Cristo. ( J. Lyth, DD )

Sufrimiento por Cristo

Se dice que los hombres aprendieron a despreciar el dolor antes de Cristo. Esto es cierto. Pero ¿dónde, salvo en la literatura y la historia cristianas, se encuentra el sufrimiento convertido en alegría, estimado como un honor y llevado como insignia de la realeza? Como un rey concede cartas y honores, Cristo, como nuestro Soberano, les da a sus discípulos el privilegio de la fe y la alianza con él. Y aún más los honra al permitirles sufrir por Él. Veamos qué tipo de sufrimientos se incluyen en esta carta.

I. Todo infligido directamente por nuestra adhesión al nombre y adoración de Cristo. Persecución física, social, doméstica.

II. Todo surge de la predicación eficaz de la verdad, ya sea por ministros o discípulos privados. No debemos contar el sufrimiento que proviene de nuestra propia temeridad en el habla o la administración, sino el que proviene de una defensa serena e inflexible de la verdad tal como es en Jesús. Por eso es un honor sufrir.

III. Todo lo que surge de la aplicación de la verdad cristiana al carácter y la conducta humana, a las costumbres de la sociedad, al egoísmo y la injusticia de los hombres. Los obreros de este campo de cosecha tendrán el pecho lleno de gavillas y la cabeza coronada de espinas. Si un hombre tiene conciencia, forzosamente se convertirá en un guerrero. Qué afinidad hay entre la generosidad y la codicia.

IV. Todo sufrimiento no tiene la naturaleza de una deshonra. Todas las abnegaciones, las vigilias, los trabajos, los cuidados, el cansancio, incidentes de una vida dedicada a la causa de Dios. Aquellos cuya parroquia es el calabozo, el hospital, la red del vicio.

V. Todo como consecuencia de una lucha con uno mismo y las circunstancias con el propósito de aumentar las disposiciones cristianas. Nuestros conflictos internos suelen ser mayores que los externos. ¿Qué sufrimiento está involucrado en nuestra lucha con el mundo, la carne y el diablo? en nuestro empeño por ser pacientes ante la enfermedad y la desgracia, resignados en medio de los dolores y el duelo.

VI. Todo ello derivado del servicio que realizamos en nombre de terceros. Madres con sus hijos en audición y educación, amigos, filántropos. Conclusión: observo en vista de esta exposición:

1. No debemos buscar el sufrimiento a propósito. El sufrimiento sin impulso moral no tiene importancia.

2. Es una vergüenza para un hombre albergar un ideal de vida cristiana que es la comodidad y la ausencia de inconvenientes.

3. Toda verdadera educación consiste en la preparación y la resistencia al sufrimiento. Dejemos que los padres se encarguen de esto.

4. Podemos formar un juicio apropiado de aquellos que son llamados a trabajar para Dios. Aquellos que están preparados para considerar el sufrimiento como un honor y considerar la victoria como un precio. ( HW Beecher. )

El valor del sufrimiento

Sin duda, a este fuego purificador se le puede atribuir en parte el brillo y la pureza de su fe en comparación con otras iglesias. ( Obispo Lightfoot. )

Las persecuciones solo arrancaron las cenizas, de modo que la llama espiritual fue constante y brillante. ( Profesor Eadie. )

La gracia y el honor del sufrimiento

Los hombres a quienes un general, en el momento crítico de una gran batalla, designa especialmente para tener la llave de su cargo, o a quienes, en el asalto de una ciudad sitiada, envía una “esperanza desesperada”, son, por su elección de ellos por peligro y probable sufrimiento, señalado como a su juicio "el más valiente de los valientes". Sus camaradas, incluso mientras se regocijan en sus corazones, puede ser que la selección los haya dejado fuera, sienten que aquellos en quienes la elección ha recaído son honrados.

De manera similar, ¿no se muestra "gracia" en la elección hecha por el "Capitán de la salvación", cuando en Su providencia Él llama a este soldado de la cruz, ya eso, a sufrir o morir bajo el estandarte? En los viejos tiempos de persecución en nuestro país, hombres que "llevaban en sus cuerpos las marcas del Señor Jesús", en miembros aplastados por la bota de hierro o desgarrados por el potro, mirando hacia atrás en días posteriores a la paciencia que el Salvador había tenido. dado a ellos en medio de su angustia, y el aumento de la sabiduría y la energía espirituales que habían venido a través de la prueba a ellos mismos, y en cierta medida también a otros, no podían dejar de estimar el sufrimiento por Cristo como un “don de la gracia.

Cuando estuvo bajo sentencia de muerte, el buen obispo Ridley escribió así a sus familiares: “Les advierto a todos, mis amados parientes, que no se asombren ni se asombren por el tipo de mi partida o disolución; porque les aseguro que creo que es el mayor honor al que fui llamado en toda mi vida. Y por tanto, agradezco a Dios de todo corazón por ello, porque le ha agradado llamarme, por su gran misericordia, a este alto honor, para sufrir la muerte voluntariamente por su causa y por su causa; a cuyo honor llamó a los santos profetas, a sus amados apóstoles y a sus benditos mártires escogidos.

Y cuando llegó el fin, y Latimer y él fueron quemados en la misma hoguera, mientras que los perseguidores solo podían ver la llama que consumía la carne, la fe de los mártires pudo discernir por sí mismos un carro de fuego esperando para llevarlos a casa. a su Señor, y por su país un fuego de celo piadoso se encendió, que todas las artes del maligno nunca deberían poder apagar. Allí había una gran "gracia". ( R. Johnstone, LL. B. )

El servicio del sufrimiento

El Dr. Tronchin, hablando un día con el hijo de César Malan acerca de su padre, quien yacía en su lecho de muerte, dijo: “Cuántas veces no he escuchado ni siquiera a sus amigos decir, cuando hablé con admiración del trabajo de su padre: 'Malan sirve a Dios con fuego, valentía y perseverancia, porque el servicio que Dios requiere de él es un servicio activo, y consiste en una actividad que responde a sus gustos y talentos.

Pero espere antes de juzgarlo definitivamente hasta que Dios lo llame a un servicio pasivo del sufrimiento ”. Dios está haciendo esto ante nuestros ojos en este momento, y ante nuestros ojos también Su siervo es hallado fiel. ( JFB Tinling, BA )

El honor de sufrir por Cristo

Se dice que uno de los testigos de la verdad cuando fue encarcelado por motivos de conciencia en los días de la reina María, escribió así a un amigo: “¡Prisionero por Cristo! ¡Qué es esto para un pobre gusano! Tal honor no tienen todos los santos. Los dos títulos que obtuve en la Universidad no me han puesto tan alto como el honor de convertirme en prisionero del Señor ”.

El misterio del sufrimiento

"¡Inexplicable esto!" —dijo la cera, como si de la llama cayera derritiéndose sobre el papel de debajo. “No te aflijas”, dijo el periódico; "Estoy seguro de que está bien". "¡Nunca había estado en tal agonía!" exclamó la cera, todavía cayendo. “No deja de tener un buen diseño y terminará bien”, respondió el periódico. Wax no pudo responder de inmediato debido a una fuerte presión; y cuando volvió a mirar hacia arriba, mostró una hermosa impresión, la contraparte del sello que se le había aplicado.

¡Ah! Ahora comprendo ”, dijo Wax, ya no sufriendo. “Me ablandaron para recibir esta hermosa y duradera impresión. Sí; Ahora veo que estaba bien, porque me ha dado la hermosa semejanza que de otra manera no podría haber obtenido ". ( Sra. Prosser ).


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Comentario Bíblico Mundo Hispano

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