Romanos 1:24 - Versión Biblia Libre (Nuevo Testamento)Así que Dios los dejó a merced de los malos deseos de sus mentes depravadas, y ellos se hicieron, unos a otros, cosas vergonzosas y degradantes. Ver CapítuloMás versionesBiblia Reina Valera 1960Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos, Ver CapítuloBiblia Nueva Traducción VivienteEntonces Dios los abandonó para que hicieran todas las cosas vergonzosas que deseaban en su corazón. Como resultado, usaron sus cuerpos para hacerse cosas viles y degradantes entre sí. Ver CapítuloBiblia Católica (Latinoamericana)Por eso Dios los abandonó a sus pasiones secretas, se entregaron a la impureza y deshonraron sus propios cuerpos. Ver CapítuloLa Biblia Textual 3a EdicionPor esto Dios los abandonó en las concupiscencias de sus corazones a la inmundicia, para que deshonraran sus propios cuerpos entre sí. Ver CapítuloBiblia Serafín de Ausejo 1975Por eso, Dios los entregó a tal impureza, a causa de sus íntimos torpes deseos, que llegaron a envilecer sus propios cuerpos. Ver Capítulo |