Él mismo no era la luz, sino que vino a testificar de la luz.
No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz.
Juan no era la luz; era solo un testigo para hablar de la luz.
Aunque no fuera él la luz, le tocaba dar testimonio de la luz.
no era él la luz, sino para que diera testimonio de la luz.)
No era él la luz, sino que venía a dar testimonio de la luz.