Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.
Tú dices tener fe porque crees que hay un solo Dios. ¡Bien hecho! Aun los demonios lo creen y tiemblan aterrorizados.
¿Tú crees que hay un solo Dios? Pues muy bien, pero eso lo creen también los demonios y tiemblan'.
¿Tú crees que Dios es uno?° Bien haces: los demonios también lo creen… ¡y tiemblan!
¿Tú crees que hay un solo Dios? Haces bien. También los demonios creen y tiemblan.
Tú crees que hay un Dios; bien haces; también los demonios creen y tiemblan.