La cordura del hombre detiene su furor, Y su honra es pasar por alto la ofensa.
Las personas sensatas no pierden los estribos; se ganan el respeto pasando por alto las ofensas.
Un hombre inteligente domina su enojo; al no hacerle caso a la ofensa se agranda.
La sensatez hace al hombre paciente, tiene por honor disimular una falta.
La cordura del hombre detiene su furor; y su honra es pasar por alto la ofensa.