Su deseo busca el que se desvía, Y se entremete en todo negocio.
La gente poco amistosa solo se preocupa de sí misma; se opone al sentido común.
El egoísta no busca sino lo suyo; se irrita ante cualquier consejo.
El hombre esquivo anda en pos de sus caprichos, Y se encoleriza contra todo buen consejo.
El que vive para sí persigue su capricho, por cualquier cosa se irrita.
Según su antojo busca el que se desvía, y se entremete en todo negocio.